La disputa por terrenos ubicados en el distrito de La Joya volvió a encenderse la semana pasada, cuando miembros de la Asociación Nuevo Olivar denunciaron agresiones físicas atribuidas a Froilán Quispe, representante de la Asociación Cristo Blanco. Según los testimonios recogidos por medio de comunicación des distrito, un grupo de encapuchados habría irrumpido en horas de la noche en los predios, golpeando a socios de Olivar, lo que dejó a una mujer hospitalizada debido a la gravedad de las lesiones.
Hernán Córdova, presidente de Nuevo Olivar, señaló que su asociación permanece instalada en la zona desde hace cinco años. Sin embargo, la situación se torna confusa: durante los años 2022 y 2023, el Gobierno Regional de Arequipa (GRA) ejecutó desalojos.
Los terrenos, de acuerdo con los documentos oficiales, pertenecen al GRA. El dominio de estas tierras está respaldado por títulos inscritos a nombre del gobierno regional. Además, diversas resoluciones, como la Resolución Gerencial General Regional N.º 312-2014, la N.º 025-2017 y la más reciente N.º 406-2024, han declarado improcedente el pedido de compra directa formulado por Quispe y han rechazado sus recursos de reconsideración.
Pese a estas decisiones administrativas, Froilán Quispe sigue afirmando tener documentos que lo acreditan como propietario. Las autoridades han desmentido esta versión y advierten que ninguna de las asociaciones tiene derecho de posesión o propiedad sobre las tierras.
