En un esfuerzo por recuperar el orden y promover el respeto por los espacios públicos, la Municipalidad de José Luis Bustamante y Rivero realizó un operativo en las inmediaciones del Avelino Cáceres, Gratersa y el Terminal Terrestre. Estas acciones se enfocaron en liberar zonas ocupadas por el comercio informal y garantizar la libre circulación de los ciudadanos.
La Gerencia de Fiscalización y Sanciones, a cargo del Ing. Raúl Medina Monroy, lideró las intervenciones exhortando a los comerciantes a respetar los límites establecidos para el ejercicio de su actividad. «La ocupación indebida del espacio público será sancionada con el decomiso de mercadería y multas que van desde los 100 soles», indicó el funcionario.
El operativo incluyó supervisiones a comerciantes de alimentos, abarrotes, animales y otros productos, en un esfuerzo por mantener un entorno urbano seguro y ordenado. Estas medidas forman parte de un plan estratégico para abordar los puntos críticos del distrito y reforzar la vigilancia en zonas de alta concurrencia.
Según Medina Monroy, durante el 2024 se trabajó con personal limitado en sectores clave. Sin embargo, en este 2025 se implementarán nuevas estrategias y se incrementará el personal para garantizar un control constante y efectivo. La prioridad es generar un impacto sostenible que fomente prácticas comerciales responsables.
El alcalde Fredy Zegarra Black reiteró su compromiso con la recuperación de los espacios públicos, subrayando que estas intervenciones continuarán con firmeza. «Queremos un distrito más seguro, limpio y organizado, donde vecinos y comerciantes convivan en un entorno respetuoso de las normas», señaló.
De cara al futuro, la municipalidad tiene previsto reforzar su equipo de fiscalización y aumentar la frecuencia de los operativos, con el objetivo de disuadir la reincidencia en la ocupación ilegal. Asimismo, se promoverán campañas de concienciación para que los comerciantes adapten sus prácticas a las normativas vigentes.
Con estas medidas, José Luis Bustamante y Rivero busca convertirse en un modelo de gestión urbana eficiente, donde el respeto por los espacios públicos sea un pilar fundamental del desarrollo comunitario.