Mujer arequipeña, madre de familia, pero sobre todo mujer libre, así era Doris Gibson. La historia de la respuesta “Un arequipeño nace donde le da gana” es casi conocida, aunque creo que de la autora se conoce poco.
Por todo esto, en el Perú queda corto eso de que el último apague la luz, sino que aquí hay que decir: “que el último jale la cadena”.
La noción de Arequipa tiene hasta cuatro niveles. Nos referimos a ella como el departamento o región, también a la provincia, luego al distrito (mal denominado “cercado”, que no existe como nombre) y de la misma forma a la ciudad.
La señora Boluarte, quien luego de su viaje a China ha regresado sintiéndose presidenta (parece que le contaron cuentos… chinos), decidió ir al desfile de los militares a los que acababa de subirles el sueldo
La identidad arequipeña se ha enriquecido con un potente ingrediente y es la revaloración de nuestra tradición gastronómica, vasta, lograda, suma brillante de tradiciones, sabores, texturas y colores.Por todo esto, ¡larga vida nuestra Sociedad Picantera!
Es incesante, se destila en mis manos, se agota con el sol del mediodía o la oscuridad de la madrugada, siempre a las tres, hace que camines velozmente al sur y yo lentamente al norte, pareciera que nunca fue, es y será siempre y si eso no es tristeza entonces es el tiempo.
El quehacer periodístico realmente me hizo más ciudadano, diría que exageradamente ciudadano. Siempre quería estar informado sobre los aconteceres locales, nacionales e internacionales...
La señora Boluarte es plenamente consciente que no la escucha ni le cree nadie y que no hay forma de salir del hoyo político en el que se encuentra, pero también sabe que no hay forma de caer más abajo.