El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, reveló que ofreció al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el control de la central nuclear de Zaporizhzhia, actualmente bajo ocupación rusa. La propuesta busca garantizar la seguridad de la planta, la más grande de Europa, y evitar un potencial desastre nuclear en medio del conflicto bélico.
Zelensky explicó que la conversación con Trump se centró en la situación de la central, ocupada por Rusia desde el inicio de la guerra. “La conversación fue sobre la central nuclear que está actualmente bajo ocupación temporal”, afirmó el mandatario ucraniano. Además, advirtió sobre los riesgos del control ruso: “Es peligroso porque Rusia controla la central nuclear. No está operativa porque Rusia no sabe cómo operarla”.
La portavoz de la Casa Blanca confirmó que Trump y Zelensky discutieron la posibilidad de que Estados Unidos asumiera el control de las centrales eléctricas ucranianas. La medida busca garantizar la seguridad de estas instalaciones estratégicas ante la amenaza rusa y evitar una crisis nuclear en la región.
Trump respondió positivamente a la propuesta de Zelensky. Según un comunicado del secretario de Estado, Marco Rubio, y el asesor de seguridad nacional, Mike Waltz, el presidente sugirió que EE.UU. podría tomar la “propiedad” del suministro eléctrico y las plantas nucleares de Ucrania. “Estados Unidos podría ser de gran ayuda en la gestión de esas plantas gracias a su experiencia en electricidad y servicios públicos”, afirmó Trump.
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La central nuclear de Zaporizhzhia ha sido un punto focal de preocupación internacional desde su ocupación por Rusia. La posibilidad de que EE.UU. asuma su control se presenta como una solución para garantizar su operación segura y estabilizar la infraestructura energética ucraniana. Sin embargo, la propuesta aún depende de negociaciones más amplias entre ambos países.
Mientras tanto, la comunidad internacional sigue atenta a los desarrollos en Zaporizhzhia, dada su importancia estratégica y los riesgos que implica su control por una potencia en conflicto. La intervención de EE.UU. podría marcar un punto de inflexión en la gestión de la crisis nuclear en Ucrania.