El domingo un bus camión que transportada ancianos hacia las playas de Camaná por encargo del municipio distrital de Majes volcó y dejó más de 30 heridos. El conductor, identificado como Ángel Morales Tacora huyó de la zona del siniestro y abandonó a las personas. Además, no cuenta con licencia para conducir ese tipo de bus. Para colmo, luego del accidente se conoció que el dueño del vehículo, Marco Antonio Ccopa Palomino, carecía de autorización para brindar servicios de transporte público y no contaba con el Registro Nacional de Proveedores (RNP); un requisito indispensable para contratar con entidades del Estado. Lo que levanta serias interrogantes sobre cómo la Municipalidad Distrital de Majes pudo haberlo contratado.

Serias irregularidades
El especialista en derecho municipal, Jorge Sumari Buendía, explica que en este caso deben verse dos temas concretos. El primero es el aspecto técnico, respecto al conductor y al vehículo. Y el segundo es el aspecto administrativo, que llevó a la contratación del bus.
Respecto al primer tema, el regidor Elmer Taparaco Mamani explicó a Revelación.pe que el conductor del vehículo no cuenta con la licencia para conducir un bus, tal como lo estaba haciendo el domingo. «El señor Ángel Morales Tacora tiene una licencia AIIB, que no es para conducir buses. Para esos vehículos se necesita una A3C. Quizás por ese motivo huyó y abandonó a los pasajeros», explicó el concejal.

Además, según la Superintendencia de Registros Públicos, el bus era de propiedad particular y no figuraba en ningún registro como unidad autorizada para el transporte de pasajeros. La Gerencia Regional de Transportes y Comunicaciones (GRTC) confirmó que ni el vehículo ni el conductor tenían los permisos necesarios para operar. «No existe registro de ese vehículo, ni de una empresa, ni del conductor. Era completamente informal», informaron.
«Sin este registro, es ilegal que cualquier persona o empresa brinde servicios al Estado. No sabemos cómo pretendía cobrar por sus servicios», añadieron.

Sin registro de proveedores
Otro aspecto importante es el procedimiento que se siguió para la contratación del bus. De acuerdo con el regidor Taparaco Mamani, para el viaje se contrataron 4 buses de manera directa y por encargo del gerente de Desarrollo Social y Humano de la comuna de Majes, José Emiliano Sosa Luna. «Él (Sosa Luna) manifestó que solicitó a Logística y que por la premura del tiempo hizo la contratación directa. Contrataron a 4 personas, entre las cuales estaba Ccopa Palomino. En este caso estamos hablando de una contratación directa sin el debido procedimiento. Es una falta grave», señaló el concejal.
Este medio además pudo comprobar que Ccopa Palomino no cuenta con el RNP. Este es indispensable para contratar con entidades del Estado, por tanto la contratación del dueño del bus alcanza otro nivel de irregularidad. «Estamos hablando de bastantes faltas. Colusión agravada, negociación incompatible, exposición al peligro y otras que serán materia de investigación», añadió Taparaco Mamani.

El concejal señaló que ya solicitó la conformación de una comisión investigadora, que en principio podría señalar faltas administrativas en el gerente Sosa Luna. Pero el especialista Sumari Buendñia advierte que también hay responsabilidad política en el alcalde Jenry Huisa Calapuja.
«Nadie cuestiona la labor de llevar a personas a la playa. Es una actividad importante, pero no debe ser improvisada. Se necesita previsión, con presupuesto y un proceso regular. Si la contratación no cumple con las normativa técnica y administrativa el alcalde también es responsable político», añadió Sumari. Este agregó que además del Consejo Municipal, el Ministerio Público debe investigar y señalar a los responsables directos del hecho y a los funcionarios implicados.

Conductor en líos
Finalmente, Jorge Sumari apuntó a que el conductor, Ángel Morales, está en serios problemas. Pues si se demuestra que no tenía la licencia respectiva para conducir el bus, deberá ser procesado. Y su situación empeora al haber abandonado a los heridos. «Estamos hablando de abandono de persona en peligro y ha eludido el dosaje etílico. Todos esos son agravantes», añadió el especialista.