El viernes tomó por sorpresa a los obreros de Construcción Civil el comunicado del Consorcio Maje 4 en el que anuncian la paralización «hasta nuevo aviso» de las obras de la vía Majes – Lluta – Huambo. La misma que se ejecuta con presupuesto del Gobierno Regional de Arequipa (GRA) y bajo la gestión del gobernador Rohel Sánchez. Fuentes de la región explicaron que el motivo es que el GRA resolvió el contrato con el consorcio que había ganado la supervisión del proyecto, por una sanción impuesta por el Tribunal de Contrataciones del Estado en contra de una de las empresas que lo conforman.
Además, la norma señala que proyectos por más de S/ 300 mil deben contar con un supervisor y que este debe contratarse como máximo 90 días después del inicio de obras. Esos plazos ya vencieron y al no contar con supervisor, la construcción de la carretera no puede continuar. En tanto, mientras Sánchez y sus funcionarios lo buscan, el Consorcio Majes 4 seguirá cobrando al menos gastos generales.

Paralización sorpresa
La paralización de la obra la informó el propio Consorcio Majes 4 a sus obreros mediante un comunicado pegado en la puerta de sus oficinas ubicadas en el distrito de Majes 4. Hasta la zona llegaron los obreros de Construcción Civil contratados para el proyecto junto a policías para realizar una constatación. Indicaron que al menos 150 obreros se quedan a la expectativa de un posible despido. A pesar de que buscaron explicaciones de los representantes de la constructora, ningún ejecutivo o ingeniero salió a dar la cara.
El problema es que luego de 3 meses de trabajos, la obra, con presupuesto de más de S/ 185 millones, no cuenta con supervisor. Desde que inició en junio el gobierno regional designó un equipo de inspectores —trabajadores de la gerencia de Infraestructura—. Estos estuvieron dando las conformidades de los avances, de acuerdo con la Contraloría, sin contar con los equipos necesarios para validar trabajos topográficos.

Pero esto se acabó, porque el GRA ya no puede continuar con la modalidad de inspectores. De acuerdo a la Ley de Contrataciones del Estado, las obras con valor de más de S/ 300 mil deben contar con un supervisor. El mismo que obligatoriamente debe ser contratado cuando mucho 90 días después de iniciada la obra. Ese plazo ya terminó.
Supervisor desechado

Con ese panorama, la gestión de Rohel Sánchez realizó el proceso de contratación de un supervisor para le obra vial. El ganador fue el Consorcio Supervisor Caylloma, conformado por Ricardo Lenin Becerra Guevara y la empresa RBG Ingenieros SAC, por monto de S/ 6.4 millones. Aunque la buena pro se dio el pasado 1 de agosto, no se comprende la demora en la firma del contrato.
Aunque fuente del gobierno regional explicaron a este medio que la gestión regional decidió cancelar todo. Esto por una sanción emitida por el Tribunal de Contrataciones del Estado en contra de RBG Ingenieros SAC y que involucra además a Ricardo Lenin Becerra.
Con esto, la obra se queda sin supervisor. Y al haber terminado el plazo de 90 días en los que se permite el inspector, el proyecto de la carretera Majes – Huambo se queda sin nadie que verifique la calidad de los trabajos. Por tanto, este sería el motivo de la decisión del Consorcio Majes 4 para suspender las obras «hasta nuevo aviso».

Un hecho que significa un nuevo retraso en uno de los proyectos «insignia» de la gestión de Rohel Sánchez. Tras la paralización del puente Arequipa – La Joya y de la carretera Jachaña – Cayarani, la obra Majes – Huambo se convierte en la tercera obra con serios problemas. Más aún cuando, de acuerdo al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), el gobierno regional ya ha girado más de S/ 58.9 millones en favor del Consorcio Majes 4. Esto por motivo del 10 % de adelanto tras la firma del contrato y otro 20 % por razón de adelanto de materiales. Esto a pesar de que, de acuerdo al portal Invierte.pe, el avance físico del proyecto es de apenas 5.5 %.
Este medio intentó comunicarse con le gerente general Berly Gonzales Arias, pero no respondió las llamadas ni los mensajes de Whatsapp.