A la paralización de las obras de construcción del puente Arequipa – La Joya, ahora se suma la resolución del contrato para la elaboración del expediente técnico y ejecución de la carretera Jachaña – Cayarani. Revelación.pe tuvo acceso a la carta notarial que envió el Gobierno Regional de Arequipa (GRA) al Consorcio Vial Caylloma, en la que justician el revés alegando que no se cumplió con presentar el primer entregable del expediente técnico. El problema es que la obra ya tenía vicios desde la licitación debido a cuestionamiento al mismo proceso de selección. Además, la gestión de Rohel Sánchez ya soltó S/ 9.4 millones en favor de la constructora. Aunque el gerente general del GRA, Berly Gonzales Arias, asegura que esa plata no llegó a manos del contratista, sino que estaría bien resguardado en un fideicomiso.
Pero ese no es el problema más grave. La gestión de Rohel Sánchez se arriesga a que el Consorcio Vial Caylloma interponga un proceso de arbitraje, que paralizaría todo lo avanzado hasta el momento hasta nuevo aviso. Aunque no hay plazos, especialistas consultados advierten que mínimo podrían ser 6 meses. Y dependiendo del resultado; en caso de ser negativo para la reacticación de la obra, se tendría que volver a convocar a una nueva licitación. Así, la obra no estaría lista al final de la gestión de Sanchez.
La carta notarial ya está en manos de la contratista y a la espera de su reacción.
Malos antecedentes
En principio, la licitación del proyecto de la vía Jachaña – Cayarani, por S/ 95.7 millones, tuvo vicios de presunto direccionamiento. En la primera licitación, en 2024, el comité seleccionador entregó la obra a un consorcio cuyo integrante era la cuestionada constructora venezolana DIMICA C.A. Esta ya había sido denunciada por presentar documentos falsos en licitaciones que ganó en otras regiones. En Arequipa pasó lo mismo y el Consejo Regional y la Contraloría ratificaron esas irregularidades en informes que revelaban graves falencias en la entrega de la buena pro y luego en la firma del contrato.
Tras el escándalo, la gestión de Rohel Sánchez decidió cancelar todo el proceso de licitación y convocar a uno nuevo. En marzo de este año el GRA anunciaba contra viento y marea al Consorcio Vial Caylloma como ganador bajo la modalidad de llave en mano. Es decir, que se encargaría de desarrollar el expediente técnico y luego ejecutar la obra. Todo por un valor de poco más de S/ 95.7 millones.
Sin embargo, el comité seleccionador dio la buena pro a pesar de serios cuestionamientos respecto a la forma en que se habían calificado las propuestas económicas. Esto fue explicado por este medio en un reportaje detallado publicado en marzo, días antes de la entrega de la buena pro. Básicamente, el comité encabezado por el entonces gerente de Infraestructura, Fabián Enriquez, había utilizado una argucia númerica para, literalmente, por un centavo excluir y descalificar la propuesta económica de otras empresas. Quedando, sospechosamente, como ganador el Consorcio Vial Caylloma.
Y tal como se preveía, esa buena pro y firma de contrato no ha terminado nada bien para las aspiraciones del gobernador Rohel Sánchez, quien busca dejar una obra importante antes de irse en diciembre del 2026.
Sin primer entregable

La carta notarial enviada por el jefe de Administración del GRA, Marvin Condori Almirón, tiene fecha del 16 de setiembre. En esta se detalla que el Consorcio Vial Caylloma presentó el Entregable Nº 01 del expediente del proyecto de la vía el 14 de julio de este año. Sin embargo, el 8 de agosto la Gerencia Regional de Infraestructura (GRI) devolvió el documento alegando que no cumplía con el «contenido mínimo requerido». Y lo consideró como «No presentado».
Ante esto, el contratista volvió a enviar el primer entregable el 21 de agosto, pero nuevamente el 28 de agosto la GRI lo devolvió con el mismo argumento de no cumplir los requisitos mínimos. Entonces, y bajo apercibimiento del GRA, el consorcio volvió a enviar su entregable el 8 de setiembre, pero fue otra vez observado bajo el mismo argumento el 12 de setiembre. Y ese mismo día se dio por resuelto el contrato con el sustento de informes de la GRI y de Asesoría Jurídica de esta gerencia.
Ya miran el arbitraje

Aunque no se conoce la reacción de la contratista aún, el gerente general del GRA, Berly Gonzales, explicó a Revelación.pe que tienen derecho a cuestionar la decisión de la región. «Siempre hay una posibilidad de conciliar, pero (en este caso) no hay nada que conciliar. Si consideran que la resolución del contrato fue irregular podrían llevarnos a un arbitraje», explicó el funcionario. De ser ese caso, la empresa puede buscar ese arbitraje solo ante la Cámara de Comercio e Industria de Arequipa, según señala el contrato.
Este tema, como mínimo podría tomar 6 meses. Luego de eso, la primera opción que tiene el GRA es convocar a la empresa que quedó en segundo lugar en el proceso de licitación. Y si no se pudiera llegar a un acuerdo entonces se tendría que convocar a un nuevo proceso de licitación. Entonces, en el peor de los casos se tendría una nueva contratista para junio del 2027.
Finalmente, respecto a los cuestionamientos que habían sobre las empresas que conformaban el consorcio y sobre el proceso de selección, Gonzales Arias indicó que: «Lamentablemente no puede hacerse a criterio personal. Gana el que cumple los requerimientos técnicos». Aunque aceptó que la gestión regional debe asumir la responsabilidad: «Es cierto. Tenemos que asumir la situación que se ha producido. Si la empresa ha incumplido no queda otra opción que rescindir», manifestó Gonzales.
Además hay un pago de S/ 9.4 millones, que ya está registrado en el sistema del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), y que corresponde al 10 % de adelanto que señala el contrato en favor de la contratista. Sin embargo, Berly Gonzales aseguró a este medio que el dinero no fue depositado a las cuentas del Consorcio Vial Caylloma, sino que fue a un fideicomiso, que se encarga de resguardar este dinero con el fin de utilizarlo en casos como estos, cuando la contratista incumple.
Rohel es responsable

En tanto, consultado, el consejero César Huamantuma señaló como principal responsable político de esta nueva resolución de contrato al gobernador Rohel Sánchez. «Se había anunciado con bombos y platillos. Los principales afectados serán los pobladores entre Jachaña y Cayarani, porque ellos esperaban con ansias una vía moderna», manifestó el parlamentario regional.
Huamantuma hizo hincapié en que el proyecto tuvo problemas desde la primera licitación y que luego también hubo cuestionamientos serios. «Es claro que el comité seleccionador hizo un trabajo deficiente. Ese personal, desde el jefe de Logistica, el gerente de Infraestructura y de Supervisión (que participaron en todo el proceso de selección), son altamente cuestionables. Lo que habría que preguntarnos es cómo estarán también Huambo – Majes y Cabrería – Pampa Cañahuas», aseveró.
Respecto a las observaciones sobre el Entregable Nº 1 de la contratista de Jachaña – Cayarani, Huamantuma teme que se haya hecho sin sustento técnico y que la empresa tenga argumentos para llevar el caso a un arbitraje, que podría significar pérdida de dinero y tiempo a la región Arequipa.
En tanto, adelantó que pedirá una comisión investigadora. La misma que servirá para citar a los funcionarios que estuvieron a cargo de la contratación y coordinación con el Consorcio Vial Caylloma. «Aunque varios ya no están, como el gerente de Infraestructura, el gerente de Supervisión ni el jefe de Logística. Parece que cada vez que hay licitaciones con estos cuestionamientos el gobernador opta por sacarlos y así evitar responsabilidades. Porque los nuevos que entran siempre dicen que no saben nada. Algo que entorpece la fiscalización del Consejo Regional. Pero esta vez vamos a citarlos», señaló el consejero.