La tensión entre el gremio transportista y el Ejecutivo escaló este jueves. Martín Ojeda, director de la Cámara Internacional de la Industria del Transporte, advirtió ante la Comisión de Transporte del Congreso que, si la presidenta Dina Boluarte y el titular del Parlamento, José Jerí, no acceden a reunirse con los representantes del sector, el paro nacional de conductores y cobradores se prolongará por 48 horas más.
Durante la sesión parlamentaria, Ojeda expresó que los transportistas viven bajo una ola de violencia sin precedentes, con extorsiones y asesinatos que se repiten cada semana. En su intervención, señaló que los gremios del cono norte, este y sur de Lima han perdido la confianza en las respuestas del Gobierno y reclaman la intervención directa de las más altas autoridades. “Tenemos que ir a un segundo escalón, y ese escalón es la Presidencia de la República y del Congreso”, enfatizó.
El dirigente también criticó el tono con que Dina Boluarte se ha referido al paro, calificando sus declaraciones como “indiferentes y desatinadas”. Según Ojeda, minimizar los crímenes o aconsejar a los conductores “no usar el teléfono” frente a los ataques refleja una falta de empatía estatal. “No se puede banalizar la muerte de quienes solo buscan llegar vivos a sus casas”, sostuvo, visiblemente indignado.
A la salida de la reunión, Miguel Palomino, vocero del sector, reforzó las críticas y acusó a la mandataria de haber tomado el paro “como una payasada”. Para él, la indiferencia oficial es una ofensa para los miles de choferes que hoy enfrentan amenazas diarias por parte de bandas de extorsionadores. “Se le está invitando para que asuma con seriedad este problema nacional”, declaró.
Palomino también dirigió un mensaje al ministro de Transportes, César Sandoval, a quien señaló por “priorizar otros temas” mientras la crisis en el sector se agrava. “Es una falta de respeto que no se atienda con urgencia el pedido de seguridad. La población y los transportistas exigen respuestas reales, no excusas”, concluyó el dirigente.
