Una madre de familia denunció presuntos tocamientos indebidos y vulneración de la dignidad de su hija, durante el último proceso de admisión en la Universidad Católica de Santa María (UCSM). Al respecto la casa de estudios emitió un comunicado en el que ratifica su disposición a colaborar con las investigaciones fiscales y policiales. Además, señalaron que durante el proceso se capturó a un postulante utilizando aparatos electrónicos.
Según la versión oficial, la evaluación se realizó el domingo 24 de agosto bajo estrictos controles internos y con apoyo de la Policía Nacional del Perú (PNP). Una práctica habitual en este tipo de procesos. Para la ocasión, se contó con un equipo de la División de Investigación Criminal (Divincri), encabezado por el brigadier PNP Marco Polo Rosas.
Durante las intervenciones de control, un postulante identificado con iniciales Q.F.L.M. fue hallado con un equipo transmisor y cables adheridos a su vestimenta. Posteriormente, él mismo reconoció portar un audífono oculto y señaló que al menos otros siete postulantes estaban involucrados en el intento de fraude.
En ese marco, una agente policial intervino a otra postulante, identificada con las iniciales L.P.C.L., lo que dio origen a la denuncia de su madre, Carla Peña. Según relató, la menor de 16 años fue sometida a un registro que vulneró su dignidad. “Un efectivo policial la llevó al baño y le indicó que tenía que retirar su ropa para revisar que no lleve ningún instrumento de plagio. Le hizo levantar el brasier e incluso bajar la trusa”, declaró indignada.
La madre añadió que su hija sufrió tocamientos y fue fotografiada en pleno examen. “Al no encontrar nada, la regresan nuevamente al salón como si nada hubiera pasado. A los 15 minutos regresa la efectivo policial para indicar que tenía que tomar fotos a ella y a su DNI delante de los demás. Mi hija salió con los nervios de punta y no pudo rendir bien el examen”, afirmó.
Ante estas acusaciones, la UCSM subrayó que no puede ni debe oponerse a un operativo policial en casos de flagrancia. Pues hacerlo constituiría obstrucción a la justicia, de acuerdo con el artículo 409-A del Código Penal. El postulante hallado con dispositivos electrónicos fue puesto a disposición de la Fiscalía Provincial Penal Corporativa de turno.
La universidad explicó que un padre de familia acudió a sus instalaciones el lunes 25 de agosto sin identificarse ni precisar el motivo, y que le ofrecieron una cita formal para el miércoles 27 de agosto. Lo cual no fue aceptado por el padre, quién se retiró.
Carla Peña, sin embargo, aseguró que nunca recibió respuestas claras. “Fui a la universidad a hacer una queja, pero ninguno de los docentes me quiso dar la cara. Los de seguridad no me dejaron ingresar. Inmediatamente fui a poner la denuncia contra la universidad y la policía. Si confiamos en una institución que debe velar por nuestros hijos, no pueden atropellarlos ni vulnerar su dignidad”, declaró.
La UCSM, por su parte, defendió sus mecanismos de control y destacó que gracias a ellos se logró identificar a postulantes que intentaban vulnerar la legalidad del examen. “Rechazamos enérgicamente cualquier intento de fraude y ratificamos nuestro compromiso de mantener procesos de admisión transparentes y equitativos, que reconozcan únicamente el esfuerzo y mérito de los postulantes honestos”, señaló.
El caso ahora se encuentra bajo investigación del Ministerio Público y la Policía Nacional. La universidad reiteró su plena disposición a colaborar con ambas instituciones para esclarecer los hechos y garantizar que se actúe conforme a la ley y el debido proceso.