Hernando de Soto, economista y político, el que fue asesor de Alberto Fujimori y tenía como asesor a Chibolín, aún no tiene claro con qué partido político postulará. El sábado llegó a la Ciudad Blanca para tramitar una agenda que podría resumirse en quemada política anticipada. Hizo una conferencia de prensa en la que habló desvaríos, luego no quiso responder preguntas de fondo sobre los políticos arequipeños que lo quieren acompañar en las próximas elecciones y terminó el domingo entregando bolsas de víveres con el logo de minera Cerro Verde.

Malas juntas de Hernando
Aunque haya nacido en Arequipa, se nota que Hernando de Soto no conoce un ápice de lo que pasa en Arequipa. Habla de formar un partido cívico que sirva para moralizar la política del país. Pero la gente que se le ha acercado son un grupo de impresentables. Que incluso la propia gente de Hernando de Soto no quiere que se los vea directamente con el político.
El membrete de Alfredo Zegarra, exalcalde provincial sentenciado por corrupto, estaba puesto en la mesa de la conferencia de prensa del sábado. Pero luego lo quitaron porque no llegó. Y no llegó porque le avisaron que era mucho roche que saliera con Hernando de Soto directamente a la prensa. Muestra de ello es que, cuando le consultamos, De Soto y sus allegados decidieron irse.
En la misma conferencia vimos a Jaime Chávez, exalcalde de Cayma, investigado por corrupción por el Ministerio Público. Y es que antes de dejar su gestión, en 2022, realizó conciliaciones truchas en las que terminó beneficiando a empresas que debían ser sancionadas y multadas.

También a German Torres, alcalde de Miraflores que no puede solucionar el problema de la basura de sus vecinos, pero que sueña con ser alcalde provincial.
Y ahí cerca en la misma mesa también el exalcalde de Yanahuara, Elvis Delgado. El de las casetas de serenazgo que hasta ahora no funcionan y el de los permisos para talar arboles y poner paneles publicitarios en su lugar. El alcalde del Jacuzzi y de tantos otros desatinos. El que quiso ser asesor del gobernador Rohel Sánchez, pero se fue sin pena ni gloria.

¿Alianza con Cerro Verde?
No sabíamos que la empresa minera Cerro Verde auspiciaba campañas políticas; al menos no tan directamente. ¿La empresa lo sabrá? Pero lo que vimos el domingo sí nos sorprendió. Bolsos de tela con el logo de Cerro Verde fueron entregados por Hernando de Soto junto a Ingrid Carpio y Alfredo Zegarra.
Carpio es regidora provincial y ya ha convertido la política en una forma de vida. Es regidora desde el 2012; primero con el movimiento regional Juntos por el Desarrollo y ahora último con Arequipa Avancemos, el pollito. Ahora, explican fuentes, es una de las principales operadoras políticas de Hernando de Soto en Arequipa.
La pregunta que nos hacemos, es sí este era el momento para llegar a la ciudad. Porque si busca ganar con todos esos «cuadros», ya de por sí tiene algunos votos, pero quedará muy lejos. ¿Quién le suma? Zegarra nada, Jaime Chávez nada, ni siquiera Manuel Vera Paredes, a quien vimos con el líder del partido Progresemos, Paúl Jaimes, que es el que pretende llevar a Hernando de Soto a la presidencia.


Ruptura temprana
Decimos que pretende, porque luego de lo que dijo Hernando de Soto en su conferencia del sábado, quizás Jaimes se la esté pensando.
Jaimes es el dueño de la agrupación política y la ofreció a De Soto. Pero Jaimes tiene ideales muy distintos a los del economista. Es un acérrimo de la pena de muerte e incluso señala que de llegar a ganar promoverá la salida del Perú del Pacto de San José y de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Dice, literal, que quienes se oponen a que se aplique mano dura, de matar, contra los sicarios y ladrones, son unos «caviares» y «cobardes»; e incluso los reta a debatir. O quién sabe, por su actitud de matón, hasta agarrarse a golpes para hacer valer su posición.

Pero De Soto la tiene clara. No es la salida dice. «Él (Jaimes) puede decir lo que quiera, pero cuando se haga la alianza se buscarán consensos. Hay que llegar a un punto intermedio», dijo para salir del paso. Pero su actitud ante la propuesta de Jaimes es de total rechazo.
¿Qué dirá Jaimes al respecto? A pesar de que ambos estaban en Arequipa, no los pudimos ver juntos en ningún momento. Al menos públicamente. Lo cierto es que parece que Hernando de Soto llegó muy temprano a quemarse con el sol del verano arequipeño.