Autoridades estadounidenses alertan sobre la expansión del Tren de Aragua en México y su disputa con cárteles por el tráfico de migrantes hacia EE.UU.
El Tren de Aragua, banda criminal venezolana conocida por su violencia y expansión transnacional, ha emergido como un actor clave en el lucrativo negocio del tráfico de migrantes hacia Estados Unidos. Según informes de Milenio, esta organización ha consolidado una red de casas de seguridad en territorio estadounidense, especialmente en El Paso, Texas.
La organización criminal compite directamente con poderosos cárteles mexicanos como el de Sinaloa. Landon Hutchens de la Customs and Border Protection (CBP) confirmó que el Tren de Aragua se suma a mafias como La Empresa y La Línea, ampliando la complejidad del contrabando humano.
La utilización de plataformas digitales y moteles como casas de seguridad es una estrategia común entre estas bandas, donde extorsionan a migrantes y sus familias. La Patrulla Fronteriza reportó un aumento del 7% en la detección de tales instalaciones en El Paso en el último año. Esto evidencia la creciente presencia del Tren de Aragua en la región.
César Martínez de Milenio, tras una semana con autoridades fronterizas, confirmó que el Tren de Aragua trafica personas. Pero también está implicado en actividades como la explotación sexual. Incidentes recientes, como el feminicidio de dos venezolanas en Ciudad de México, vinculan a esta banda con crímenes atroces que revelan su expansión hacia nuevos territorios.
La historia del Tren de Aragua se remonta a sus orígenes como sindicato carcelario en Venezuela. Luego evolucionó hacia una megabanda criminal bajo el liderazgo de ‘Niño Guerrero’. Aprovechando la migración masiva desde Sudamérica hacia Estados Unidos, el Tren de Aragua ha diversificado sus operaciones criminales. Ahora incluye la trata de personas y narcotráfico, extendiendo su influencia por varios países latinoamericanos.
La designación del Tren de Aragua como organización terrorista por Texas refleja la severidad de la amenaza que representa. Con miles de miembros y una infraestructura consolidada, su expansión continúa desafiando los esfuerzos internacionales de seguridad y control fronterizo.