Contraloría evidenció falta de medicamentos, instrumental y equipamiento en el puesto de salud de Zamácola. Además, el área de emergencia no tiene instrumental básico para atender a los pacientes.
La situación del Centro de Salud “Maritza Campos” de Zamácola es evidencia de todo lo que va mal en la gestión del gobernador Rohel Sánchez; y en especial en el sector salud. Y es que una visita de inspección de auditores de la Contraloría no encontró siquiera guantes, mascarillas o siquiera suturas para curar a los heridos que lleguen al sanatorio. El informe que entregaron da cuenta de está desabastecido de medicamentos, materiales e insumos. Además, el área de emergencia no tiene equipamiento mínimo y no hay un debido control de permisos de salidas del personal médico y trabajadores.
Sin ambulancias eficientes
De acuerdo al informe de visita de control Nº 026-2024-OCI/0663-SVC da cuenta que de las dos ambulancias con las que cuenta el centro de salud de Zamácola, solo una está operativa. Sin embargo, esta no es propia del centro, sino que está en calidad de préstamo por el centro médico de Ciudad Municipal. Y para colmo no está debidamente abastecida con equipamiento, medicamentos e insumos.
De acuerdo con la Contraloría, la ambulancia no tiene, entre otros, equipo de aspiración, juego de féculas o pilas de repuesto para la linterna. Tampoco cuenta con agua destilada o bicarbonato de sodio 8.4%. Y si hablamos de insumos, para atender alguna emergencia, la ambulancia no tiene algodón o gasas que indiquen fecha de esterilización.
Sin medicamentos o equipamiento mínimo
Otro aspecto importante es la falta de medicamentos y equipamiento. En primer lugar, los auditores de la Contraloría constataron que el área de farmacia tiene stock cero en al menos 22 tipos de medicamentos. Estos incluyen: prednisona, sulfato ferroso, catéter intravenosos, guante quirúrgico, máscaras de oxígeno pediátricas y suturas.
El mismo problema se encuentra en el área de emergencia. Allí no se cuenta con desfibrilador externo, glucómetro portátil, electrocardiógrafo, monitor de funciones beatles de 5 parámetros y pantoscopio. Este último es necesario para el examen de ojos, oídos, naríz y laringe.
De la misma forma, la Contraloría constató que no hay un control adecuado de las vacunas con las que cuenta el centro médico. Y es que en las vacunas contra el Rotavirus y el Vírus del Papiloma Humano (VPH) se encontró inconsistencias entre el stock disponible y el registro documentario.
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Registro incompleto de papeletas de permiso
Otro problema importante es el registro de permisos de salida del personal de salud. Durante la inspección los auditores de la Contraloría encontraron irregularidades en los registros de permisos de salida de tres trabajadores. Estos no registraron la hora de regreso ni el motivo del permiso.
