El Equipo Especial de Fiscales Contra la Corrupción en el Poder (Eficcop) ha revelado un esquema de corrupción vinculado a Nicanor Boluarte, hermano de la presidenta Dina Boluarte. La red, conocida como 'Los Waykis', habría influido en la designación de 47 prefectos y subprefectos en todo el país, recurriendo a pagos y favores políticos.
Como se recuerda el Equipo Especial de Fiscales Contra la Corrupción en el Poder (Eficcop) ha solicitado 36 meses prisión preventiva para cuatro personas clave vinculadas a la red de influencia conocida como ‘Los Waykis’, liderada por Nicanor Boluarte, hermano de la presidenta Dina Boluarte. Esta red habría intervenido en la designación de al menos 47 prefectos y subprefectos entre septiembre y diciembre de 2022, utilizando un esquema de pagos y favores para influir en estas decisiones.
La audiencia de este pedido de prisión preventiva se llevará a cabo el día 21 de agosto desde las 11 de la mañana. El juez Concepción Carhuancho presidirá la sesión.
Modus Operandi y Pagos
El pedido de prisión preventiva del Eficcop describe cómo los integrantes de ‘Los Waykis’, encabezados por Nicanor Boluarte, manipularon los procesos de designación en el Ministerio del Interior. Los candidatos a prefectos y subprefectos habrían realizado pagos que oscilaban entre S/5,000 y S/10,000 para asegurar sus nombramientos. Estos pagos se canalizaban a través de intermediarios como Jorge Jaime Yalico y Jorge Fernández, quienes coordinaban con Nicanor Boluarte.
Un aspecto importante mencionado en el pedido es la organización de «polladas» en diversas regiones, que servían para recaudar fondos en apoyo al partido Ciudadanos Por el Perú.. En una de estas «polladas», realizada en octubre de 2022 en Lima, se recaudaron cerca de S/30,000. Los fondos fueron a parar al partido y los candidatos a prefectos gestionaban la venta de las polladas.
También puedes leer: Corte Suprema ratifica condena de Daniel Urresti por el asesinato de Hugo Bustíos
Casos Clave: Puno y Cajamarca
El Eficcop destaca el caso de Percy Castillo. Pagó S/7,000 para que lo designen como prefecto en Puno, a pesar de no cumplir con los requisitos de experiencia para el cargo. Su nombramiento generó controversia debido a la percepción de favoritismo y la falta de transparencia en el proceso.
Otro caso relevante es el de la prefecta de Cajamarca, Kati Silva, quien fue nombrada gracias a su relación con Jorge Jaime Yalico, según la investigación del Eficcop. A pesar de tener antecedentes por violencia familiar, Silva fue designada en el cargo, lo que pone en duda los criterios utilizados en su selección.
