El Indecopi ha emitido un llamado contundente a los colegios privados para que cumplan con la Ley 23585. Esta garantiza becas integrales a estudiantes que han perdido a sus padres o tutores responsables de su sustento. En el marco del año escolar 2025, la institución recuerda que estos menores tienen derecho a acceder a una educación sin costos, asegurando así su continuidad académica.
La norma establece que, en casos de fallecimiento, inhabilitación física o mental permanente, o internamiento por sentencia judicial del padre o tutor, los estudiantes deben recibir una beca que cubra matrículas, pensiones, exámenes y otros gastos educativos. Para acceder a este beneficio, las familias deben acreditar la pérdida del sostén económico y demostrar la falta de recursos para cubrir los estudios.
El Indecopi no solo fiscaliza, sino que también sanciona. Un caso emblemático ocurrió en 2024, cuando el colegio Cambridge College Lima S.A.C. fue obligado a otorgar becas a dos estudiantes cuyo padre había fallecido. La Sala Especializada en Protección al Consumidor ordenó al colegio devolver todas las pensiones pagadas desde el fallecimiento y garantizar las becas correspondientes. Este precedente refuerza el compromiso de la institución con el cumplimiento de la ley.
Sin embargo, la beca no es incondicional. Puede suspenderse por bajo rendimiento o mala conducta del estudiante, y se pierde definitivamente en caso de expulsión. Estas condiciones buscan equilibrar el apoyo con la responsabilidad académica y disciplinaria de los beneficiarios.
El Indecopi ha habilitado múltiples canales para que las familias reclamen ante el incumplimiento de esta y otras normas. A través del correo sacreclamo@indecopi.gob.pe, la plataforma Reclama Virtual o los teléfonos 224-7777 (Lima) y 0800-4-4040 (provincias), los ciudadanos pueden denunciar vulneraciones a sus derechos en el servicio educativo privado.
La educación es un derecho que no debe truncarse por la adversidad. Con esta normativa, el Estado busca proteger a los menores en situación de vulnerabilidad. Asegurando que la pérdida de un ser querido no signifique también la pérdida de su futuro. Los colegios privados tienen la responsabilidad de ser parte de esta solución.
