En un operativo contundente contra el crimen organizado, la Policía Nacional allanó dos almacenes en el centro comercial La Isla, ubicado en el distrito de José Luis Bustamante y Rivero, en Arequipa. Durante la intervención, realizada el sábado 15 de febrero, se incautaron armas de fuego, municiones y 31 kilos de marihuana. Este golpe a la delincuencia reveló una sofisticada red de tráfico de drogas y armas.
Los almacenes, identificados con los números 031 y 033, aparentaban estar abandonados. Sin embargo, al interior se encontraron cajas con envíos de droga y armas, que habrían llegado desde Lima a través de una agencia de transporte. Los locales estaban forrados con papel aluminio para ocultar el olor de la marihuana. Adentro contaban con balanzas grameras, evidenciando su uso para la venta de drogas.
La investigación comenzó tras la detención de un microcomercializador de drogas, quien señaló que había adquirido la sustancia en uno de los locales del centro comercial. Esto llevó a los agentes a rastrear los almacenes, donde descubrieron 30 kilos de marihuana en una caja de cartón forrada con papel film. En otra caja, se halló un paquete de Cannabis Sativa con un peso de un kilo.
Pero no solo se encontraron drogas. En otras cajas, la Policía descubrió un arsenal que incluía un fusil y una pistola Glock 9mm. Además de 600 municiones de diversos calibres y accesorios para convertir pistolas en armas de mayor capacidad. Según el general PNP Olger Benavides Ponce de León, jefe de la Región Policial Arequipa, estos locales funcionaban como centros de almacenamiento y distribución de drogas y armas.
Los accesorios incautados permitían modificar pistolas semiautomáticas para que funcionaran como armas automáticas, aumentando su letalidad. Además, se encontraron 65 gramos de clorhidrato de cocaína y más de 300 municiones adicionales, lo que confirma la peligrosidad de la operación desmantelada.
Aunque no se realizaron detenciones durante el operativo, las autoridades ya tienen identificadas a las personas que recibían las encomiendas. La investigación continúa abierta para desarticular por completo esta red criminal que operaba desde el corazón de un centro comercial. Este golpe representa un avance significativo en la lucha contra el tráfico de drogas y armas en la región.