La Contraloría General recomendó al Gobierno Regional de Arequipa (GRA) y a la Municipalidad Provincial de Arequipa (MPA) incorporar planes de gestión de riesgos en los expedientes técnicos de las obras actuales y las que se ejecutarán durante la temporada de lluvias, prevista de diciembre de 2024 a marzo de 2025. Con esta medida, se busca reducir suspensiones y daños en los proyectos de la región de acuerdo con los informes de orientación de oficio.

Los responsables de las obras deben implementar estos planes durante la ejecución, mientras los residentes y supervisores activan las medidas preventivas necesarias. La gestión adecuada de estos planes de riesgos permite evitar paralizaciones y costos adicionales no programados.

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Los informes se basan en las directivas del Organismo Supervisor de las Contrataciones del Estado (OSCE) y de la propia Contraloría General, que regulan la planificación de obras públicas bajo administración directa o contratada. Además, se sustentan en datos históricos del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), los cuales alertan sobre precipitaciones intensas en el sur del Perú durante el periodo señalado.

La Contraloría subrayó que en años anteriores las lluvias provocaron la paralización de obras, daños estructurales y aumentos significativos en los presupuestos. Por ello, insiste en que los responsables prevean y mitiguen estos riesgos mediante planes adecuados en los expedientes técnicos.

El 20 y 21 de noviembre de 2024, la Contraloría remitió los informes al alcalde provincial de Arequipa y al gobernador regional, respectivamente. Asimismo, la entidad mantiene ambos informes disponibles en su portal institucional, como parte de su esfuerzo por garantizar transparencia y acción oportuna.

La Contraloría espera que las autoridades adopten estas recomendaciones para asegurar la continuidad y calidad de las obras, en beneficio de la población arequipeña. Se estima que no ocurra experiencias pasadas como en la obra vial Bicentenario en la cual hubo retrasos por las precipitaciones. Tras la activación de la torrentera de la avenida Los Incas, el flujo de agua, lodo y escombros ingresó en dicho proyecto.