El Gobierno prorrogó el Estado de Emergencia en 12 distritos de Arequipa y Moquegua por contaminación hídrica, mientras un informe técnico revela graves incumplimientos en planes de cierre de Aruntani, responsable del desastre ambiental.
El Gobierno extendió por 60 días el Estado de Emergencia en 12 distritos de las provincias de Islay, en Arequipa, y General Sánchez Cerro, en Moquegua, debido al peligro inminente de contaminación hídrica. La medida, oficializada mediante el Decreto Supremo N° 131-2024-PCM, busca continuar acciones inmediatas y excepcionales para reducir el riesgo muy alto y garantizar la rehabilitación en las zonas afectadas.
La contaminación, atribuida a la mina Florencia-Tucari (Aruntani), ha impactado gravemente la cuenca del río Tambo desde 2015, afectando también el río Coralaque en Moquegua. Según estudios de la Red de Salud Islay, cuyos resultados se conocieron en julio de este año, el 88% de 420 personas examinadas presenta altos niveles de arsénico, principalmente menores de 11 años. Los análisis identificaron como fuentes de contaminación el consumo de agua y productos agrícolas afectados por los relaves mineros.
La declaratoria de emergencia inicial, dispuesta el 1 de agosto de 2024 mediante el Decreto Supremo N° 077-2024-PCM, contempló un plazo de 60 días para acciones urgentes. Posteriormente, se prorrogó con el Decreto Supremo N° 102-2024-PCM (1 de octubre) y ahora con el N° 131-2024-PCM, vigente desde el 30 de noviembre. “Subsisten acciones pendientes de ejecución, especialmente la provisión de agua apta para el consumo humano”, señala el Informe Técnico N° 000274-2024-INDECI/DIRES.
Distritos afectados y acciones en curso
En Islay, los distritos bajo emergencia son Punta de Bombón, Cocachacra, Deán Valdivia, Mollendo, Islay y Mejía(Arequipa); en Moquegua, Chojata, Matalaque, Quinistaquillas, Omate, Coalaque y La Capilla enfrentan problemas similares. Las entidades responsables, entre ellas INDECI y ministerios como Salud y Vivienda, deben continuar con la ejecución de con los gobiernos regionales y locales, sin financiamiento adicional del Tesoro Público. Las intervenciones deben estar técnicamente sustentadas y alineadas con el evento de contaminación.
Hasta el momento se conoce que se han instalado bladers de agua en dos instituciones educativas; desde septiembre se viene repartiendo agua potable en cisternas a la población de los distritos del valle de Tambo; y también se han instalado dos purificadores de agua en zonas en las que el consumo de agua provenía directamente de manantiales, entre otras acciones. .
El Instituto Nacional de Defensa Civil (INDECI) y los gobiernos regionales de Arequipa y Moquegua, emitieron un informe técnico en el que se menciona que la capacidad de respuesta local sigue sobrepasada, lo que obliga a continuar con la intervención del Gobierno Nacional.
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Compromisos incumplidos
Pese a la urgencia, persisten cuestionamientos por la falta de medidas concretas. Ya han pasado prácticamente 120 días y aún no se disminuye el estatus de riesgo muy alto de contaminación para la población de Islay. Promesas como el cierre definitivo de la mina Florencia-Tucari y su plan de remediación y supervisión ambiental efectiva aún no se materializan.
En septiembre, la empresa estatal Activos Mineros (AMSAC) entregó al Ministerio de Energía y Minas (MINEM) un diagnóstico técnico elaborado por CESEL Ingenieros sobre las unidades mineras Florencia-Tucari, en Moquegua, y Arasi, en Puno. El informe detalla incumplimientos en los planes de cierre de estas operaciones, gestionadas por la Compañía Minera Aruntani SAC, responsables de la contaminación de los ríos Coralaque y Llallimayo. Además, el documento incluye alternativas técnicas para remediar los daños, quedando en manos del MINEM definir las acciones necesarias conforme a la normativa vigente, sin embargo después de la entrega del diagnóstico no se tiene noticias de los siguientes pasos del gobierno.
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