La corrupción en Arequipa genera pérdidas millonarias. Obras paralizadas, desconfianza en las instituciones y afectaciones directas a servicios básicos reflejan el impacto de la mala gestión en la región.
La corrupción y la mala gestión de recursos públicos continúan afectando gravemente a Arequipa. En 2023, la región registró pérdidas por S/ 928 millones debido a estos problemas, según la Red de Estudios para el Desarrollo (REDES). Este monto equivale a la pérdida de S/ 13.1 por cada S/ 100 de gasto público, colocando a Arequipa como la sexta región con mayor impacto económico por corrupción en el país.
“La corrupción genera pérdidas económicas que impiden financiar proyectos que mejorarían la calidad de vida. Por ejemplo, los recursos desviados podrían haberse utilizado para construir más de 180 postas médicas”, explicó Almendra Rodríguez, politóloga de REDES. También señaló que la falta de recursos afecta directamente a solucionar problemas en los servicios de la ciudadanía. Este es el caso del Hospital Carlos Seguín, que reportó tomógrafos averiados en julio pasado.
Obras paralizadas
El impacto de la corrupción no solo se refleja en las pérdidas monetarias, sino también en el retraso de proyectos clave. Según la Contraloría, hasta septiembre de 2024, 146 obras en Arequipa permanecen paralizadas por más de seis meses, acumulando un valor de S/ 4 mil 857 millones. Entre los proyectos afectados destacan el mejoramiento de la carretera Viscachani-Callalli-Sibayo-Caylloma, el puente Freyre en Islay y la ampliación del sistema de agua potable en la provincia de Arequipa.
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Focos de corrupción
Además, la Contraloría identificó a las municipalidades de Uchumayo, Cerro Colorado y Arequipa como las entidades con mayores índices de corrupción. A nivel regional, el Gobierno Regional de Arequipa ocupa el segundo lugar en denuncias por corrupción, con mil 593 casos registrados hasta septiembre de 2024. Los delitos más comunes incluyen peculado, colusión y aprovechamiento indebido del cargo.
Consecuencias económicas y sociales
La politóloga Rodríguez destacó que la corrupción afecta no solo a las finanzas públicas, sino también a la inversión privada. Afirmó que cuando las empresas desconfían de las instituciones, disminuyen las inversiones, perjudicando el desarrollo de la región. Y destacó que la inversión privada es clave para el progreso económico y la reducción de la pobreza.
Pilares contra la corrupción
Para combatir este problema, REDES propone la transparencia en la selección de funcionarios. Los concursos públicos deben ser imparciales, priorizando la capacidad técnica y la ética profesional. Además, se debe fortalecer el sistema de justicia. Indican que es necesario agilizar los procesos penales y garantizar la protección de informantes y testigos en casos de corrupción. Por otro lado, destacan que las autoridades deben estandarizar y publicar las compras y negociaciones de las entidades públicas. Y establecer audiencias públicas que fomenten la comunicación con la ciudadanía y generen confianza en los servidores públicos.
La implementación de estas medidas podría reducir significativamente el impacto de la corrupción en Arequipa, un problema que no solo afecta los recursos económicos, sino también la calidad de vida de sus habitantes.
