La caída del exmandatario se selló con una sentencia de 14 años de prisión efectiva por los sobornos recibidos durante su gestión como gobernador de Moquegua. El juzgado determinó que Martín Vizcarra cobró coimas en los proyectos Lomas de Ilo y el Hospital de Moquegua, delitos que ameritan la ejecución inmediata de la pena. Mientras su defensa anunció apelación, el exmandatario deberá permanecer en el penal de Barbadillo y asumir una inhabilitación por 9 años para ejercer cargos públicos.
Sentencia anunciada

La lectura del fallo, a cargo de la jueza Fernanda Isabel Ayasta Nassif, detalló que la pena se obtuvo sumando las condenas de seis y ocho años por los dos proyectos investigados. El juzgado hizo hincapié en la gravedad de los hechos y en la responsabilidad que recayó sobre Vizcarra durante el periodo en que se cometieron los actos ilícitos.
A pesar de que el exgobernador asistió puntualmente a las audiencias, el tribunal remarcó que su participación procesal no era suficiente para suspender la ejecución de la sentencia. Por ello, se ordenó el cumplimiento inmediato de la pena y la inhabilitación por nueve años para ejercer cargos públicos, además de una multa que asciende a S/ 94.900.
Durante la audiencia, Vizcarra reaccionó desde sus redes sociales y calificó el fallo como una venganza política. Su hermano Mario, desde los exteriores de la sala judicial, avivó la tensión con duros cuestionamientos a quienes consideró enemigos políticos y fue respaldado por simpatizantes del partido Perú Primero.
El camino judicial, sin embargo, aún tiene capítulos por recorrer. Su abogado, Erwin Siccha, anunció la apelación, mientras que la Procuraduría cuestionó el monto de la reparación civil. El fiscal Germán Juárez Atoche recordó que la Fiscalía había solicitado 15 años y no descartó que, tras la revisión, la pena incluso aumente.
Testigos lo delataron
Los argumentos del juzgado se apoyaron principalmente en el testimonio del exgerente de Obrainsa, Elard Paul Tejada, quien detalló el pago de S/ 1 millón por Lomas de Ilo, fraccionado en dos entregas. A esto se sumó la acusación de un pago de S/ 1.3 millones por el Hospital de Moquegua, presuntamente encubierto mediante contratos simulados.
El expediente también incluyó la reparación civil de S/ 2.336 millones que deberá afrontarse junto con las empresas señaladas por su responsabilidad en los pagos ilícitos. El Equipo Especial Lava Jato sostuvo que las coimas ascendieron a S/ 2.3 millones y que Vizcarra intervino para favorecer licitaciones de obras de gran envergadura.
El historial penitenciario del expresidente vuelve ahora al centro del debate. En procesos previos, fue trasladado entre Barbadillo y Ancón II, lo que generó controversias sobre decisiones políticas dentro del sistema penitenciario. Vizcarra denunció trato arbitrario y cuestionó los constantes cambios de penal.
Con este antecedente, todo apunta a que el exmandatario sería recluido nuevamente en el penal de Barbadillo, en Ate, destinado a exfuncionarios de alto rango. Allí seguiría un régimen diferenciado del de la población común, repitiendo el camino que transitaron otros expresidentes procesados por corrupción.




