Desde 1982, cada segundo domingo de setiembre se conmemora el Día de la Familia Peruana, fecha que busca reconocer el papel esencial de las familias en la sociedad. Este año, la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil) resaltó que el respeto a los derechos laborales no solo protege al trabajador, sino también fortalece el núcleo familiar. Maternidad, paternidad, seguridad social y asignaciones son parte de las garantías que permiten equilibrar empleo y vida personal.
La intendente regional de la Sunafil en Arequipa, Carolina Calderón, subrayó que el descanso por maternidad y paternidad, la hora de lactancia y los subsidios relacionados con el cuidado son pilares de un sistema que busca conciliar responsabilidades laborales y familiares. Para la institución, el trabajo no debe ser un obstáculo, sino un aliado en el desarrollo humano y en la protección de los vínculos más cercanos.
Calderón recordó también que la legislación nacional prohíbe el trabajo infantil y regula de forma estricta el empleo adolescente. Los menores de entre 14 y 17 años solo pueden laborar bajo autorización y en jornadas reducidas, garantizando que no abandonen su educación y que tengan acceso a seguridad social desde el primer día en planilla. Con ello, se busca que la experiencia laboral temprana no se convierta en explotación.
Otro punto destacado es el rol de la seguridad social en salud y pensiones. Según Carolina Calderón, estos beneficios aseguran cobertura médica y estabilidad económica en la vejez. A la vez que protegen al cónyuge e hijos en caso de invalidez o fallecimiento del trabajador. De este modo, los aportes obligatorios se convierten en un respaldo directo a la familia, incluso después de la etapa productiva.
Finalmente, la Sunafil presentó iniciativas de orientación y fiscalización. Solo entre 2024 y lo que va de 2025, realizó más de 18 mil órdenes de inspección y aplicó multas que superan los 40 millones de soles. Además, lanzó el aplicativo “Sunafil en tus manos” para consultas y denuncias, reforzando el acceso ciudadano a la protección de sus derechos. Con estas acciones, reafirma su compromiso con un principio central: el respeto laboral es también respeto a la familia.




