La creciente ola delictiva que golpea a Arequipa ha llevado al distrito de Cayma a actuar con firmeza. Robos, extorsiones y sicariato han generado preocupación entre los vecinos. Frente a este escenario, el alcalde Juan Carlos Linares asumió el liderazgo de una estrategia integral para recuperar la tranquilidad. Bajo el lema “Sin desmayo, sin descanso, sin tregua a la inseguridad”, el municipio articula esfuerzos con la Policía Nacional del Perú y el serenazgo local, desplegando acciones concretas para frenar la delincuencia.

Uno de los pilares de esta ofensiva es el fortalecimiento del patrullaje. En sesión de Concejo Municipal se aprobó el mantenimiento de los patrulleros de la comisaría de Casimiro Cuadros, y se proyecta extender esta medida a otras unidades policiales del distrito. Entonces el objetivo es claro: que todos los vehículos estén 100% operativos para garantizar rondas constantes y una respuesta rápida ante cualquier emergencia. Esta acción apunta directamente a reforzar la presencia policial en las calles.

El segundo frente es la vigilancia digital. Actualmente, Cayma opera 128 nodos visuales activos que se enlazan directamente con la base operativa del serenazgo, la cual funciona las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Además, se han entregado 300 cámaras de seguridad que ya están instaladas en puntos estratégicos del distrito. Esta red tecnológica permite monitorear en tiempo real las zonas más vulnerables y actuar con rapidez frente a cualquier hecho delictivo.

Pero la seguridad no solo se combate desde el municipio. También se ha activado el poder de la organización vecinal. En total, 109 juntas vecinales colaboran con la PNP y el serenazgo para prevenir delitos y alertar sobre actividades sospechosas en sus comunidades. Esta articulación vecinal ha demostrado ser clave para detectar riesgos a tiempo y fortalecer el tejido social frente al crimen.

También te puede interesar: Cayma apuesta por la educación: construirán moderno colegio en la parte alta

La protección de los escolares también es parte del plan. Se ha puesto en marcha la activación de las BAPES, brigadas que resguardan la entrada y salida de los niños en los centros educativos. A ello se suma el funcionamiento de un nuevo puesto de auxilio inmediato en la zona alta de Cayma, una de las más alejadas, que ahora cuenta con atención rápida ante cualquier eventualidad.

Como complemento tecnológico, el municipio ha lanzado Smart Muni. Se trata de una aplicación para celulares que permite a los ciudadanos emitir alertas rápidas en casos de peligro. Esta herramienta busca involucrar a la población en el sistema de respuesta, facilitando una comunicación directa con las autoridades. Por último, para el alcalde Juan Carlos Linares, la lucha contra la delincuencia no admite pausas: “Nuestra lucha es firme. No vamos a dar tregua a la delincuencia. En Cayma, la seguridad es prioridad”, sentenció.