Los docentes de las universidades públicas del país se preparan para acatar una huelga nacional indefinida a partir del 10 de noviembre, en reclamo de mejoras salariales y un mayor presupuesto para el sector Educación. La medida fue acordada durante una asamblea nacional de delegados celebrada el pasado 16 de octubre, en la que participaron representantes de diversos sindicatos universitarios del Perú.

El anuncio en Arequipa fue realizado por Roger Tahua Delgado, secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de la Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa (SUTUNSA). Este explicó que la decisión responde a la falta de atención del Estado frente a compromisos asumidos con el magisterio universitario.

“El 16 de octubre una asamblea nacional de delegados de diferentes bases sindicales de las públicas del Perú tomó la decisión de ir a la huelga nacional indefinida este 10 de noviembre. Hay demandas que tienen que ver con el presupuesto”, señaló Tahua. El dirigente precisó que el sector Educación cuenta actualmente con 4 mil millones de soles, monto que consideran insuficiente para atender las necesidades de infraestructura, investigación y remuneraciones.

Los gremios universitarios exigen que el presupuesto para educación se eleve al 6% del Producto Bruto Interno (PBI), tal como lo recomiendan organismos internacionales y establece la propia política educativa nacional.

Otra de las principales demandas es el cumplimiento de la Ley Universitaria N.º 30220, que dispone la homologación salarial entre los docentes universitarios y los magistrados del Poder Judicial. Sin embargo, esta disposición no se ha aplicado plenamente desde su promulgación.

“Buscamos una escala salarial justa. Hemos planteado recibir un aumento escalonado año tras año, es una escala remunerativa progresiva”, agregó Tahua Delgado. También aseguró que los docentes tienen el compromiso de recuperar las clases una vez concluida la medida de fuerza, a fin de no perjudicar a los estudiantes.

Mientras tanto, el sindicato exhortó al Ministerio de Educación y al Ministerio de Economía y Finanzas a instalar una mesa de diálogo antes del inicio de la huelga para evitar la paralización total de actividades en las universidades públicas, un escenario que afectaría a miles de estudiantes a nivel nacional.