Tauría: niños enferman de hepatitis mientras esperan por agua potable

El distrito de Tauría, en la provincia de La Unión (Arequipa), enfrenta una grave crisis sanitaria a causa del consumo de agua contaminada. Mientras el proyecto de saneamiento rural permanece paralizado desde hace cuatro años, los pobladores —en su mayoría niños— padecen enfermedades infecciosas como la hepatitis A y gastroenterocolitis. Pese a los reiterados pedidos de intervención, el Gobierno Regional de Arequipa (GRA) no ha dado respuesta ni retomado los trabajos.

Piden ayuda

El alcalde Jesús Llamoca pidió que se culmine la obra lo más pronto posible.

El alcalde distrital, Allan Jesús Llamoca Nina, llegó hasta el Consejo Regional de Arequipa para denunciar el abandono del proyecto de abastecimiento de agua potable por la actual gestión del gobernador Rohel Sánchez. “En lugar de mejorar nuestra calidad de vida, el proyecto inconcluso la ha empeorado. Hemos tenido que trabajar manualmente para poder acceder al agua”, declaró el burgomaestre.

Si bien la entidad regional ejecutó el proyecto “Mejoramiento del servicio de agua, desagüe y planta de tratamiento de aguas residuales”, la obra nunca se concluyó. Tras alcanzar un avance físico del 95 %, en 2021 los trabajos fueron suspendidos a raíz de un arbitraje con la empresa FM Contratistas y hasta hoy no ha sido liquidada. Esto impide destinar nuevo presupuesto o retomar su ejecución. El costo inicial de S/ 3,4 millones terminó incrementándose a S/ 5,3 millones durante la actual gestión regional, sin que se registre mejora alguna ni nuevos avances.

Entre tanto, unos 500 pobladores de este distrito altoandino siguen bebiendo agua contaminada. La que obtienen de manantiales situados a más de 15 kilómetros del pueblo sin ninguna protección sanitaria. El líquido, conducido por mangueras desgastadas e inadecuadas, se contamina fácilmente con residuos, sedimentos y desechos de animales, lo que ha provocado que niños enfermen de Hepatitis A y enfermedades gastrointestinales. 

Exigen intervención 

Imágenes muestran la contaminación que sufren las fuentes de agua y que causan enfermedades.

Un memorial firmado por las autoridades locales y comunales el 14 de julio de 2024, dirigido al gobernador, advierte que el manantial de Apuccucho —fuente principal de abastecimiento— se encuentra expuesto al ingreso de vacunos, ovinos y aves, lo que agrava la contaminación. “En años anteriores se hallaron incluso animales muertos dentro de las mangueras de conducción”, señala el documento. A pesar de las denuncias, la entidad no dispuso la intervención técnica ni financiamiento.

La Municipalidad Distrital de Tauría, clasificada como tipo E, carece de recursos para financiar obras de gran envergadura. En su último oficio, remitido el 30 de septiembre de 2025, el alcalde volvió a solicitar financiamiento para ejecutar un proyecto adicional, enviando tres tomos del expediente técnico al GRA. Sin embargo, no obtuvo respuesta, lo que refuerza la sensación de abandono institucional en una de las jurisdicciones más alejadas y olvidadas de la región.

La falta de agua segura ya tuvo consecuencias graves. Un informe del Puesto de Salud de Tauría, elaborado a solicitud del municipio, reveló que siete de doce menores analizados dieron positivo a hepatitis A durante un brote ocurrido en abril. “Esta enfermedad refleja la mala higiene y la contaminación del agua y los alimentos en el distrito”, señala el documento. El mismo que además registra seis casos de gastroenterocolitis en el último mes. Aunque los pacientes lograron recuperarse, el riesgo de nuevos brotes es constante.

A nivel técnico, los sistemas de captación de agua instalados en 2009 y 2020 presentan roturas, filtraciones y deficiencias sanitarias. El caudal de la toma de Hacha (0.34 l/s) resulta insuficiente para abastecer al distrito, mientras que la toma de Apuccucho, añadida por la población, carece de estructura de captación y tratamiento. Pese a los intentos del municipio por clorar el agua cada 15 días, el tratamiento es limitado y no garantiza la potabilidad del servicio.

El alcalde Llamoca advierte que, de continuar la inacción del Gobierno Regional, interpondrá acciones legales contra el gobernador por incumplimiento de funciones. “No podemos seguir esperando mientras nuestros niños enferman. El agua es vida, y en Tauría nos están negando ese derecho”, declaró.