Mientras Sedapar planea aumentar la tarifa del agua potable en un 13,7 %, los vecinos del distrito de Socabaya denuncian que alcanzaron más de tres días sin este servicio básico debido a trabajos inconclusos de cambio y reparación de tuberías. Esta situación despertó indignación entre los pobladores de esta jurisdicción, que cuestionan que la empresa pretenda cobrar más cuando no garantiza un suministro estable.
La empresa prestadora de servicios de agua potable y alcantarillado — Sedapar informó que la interrupción del servicio obedeció a varias filtraciones detectadas en distintos puntos del distrito, que obligaron a cortar temporalmente la distribución de agua potable para su reparación. Según el jefe de Imagen Institucional, Ernesto Delgado, la distribución de líquido elemento se regularizó en horas de la tarde tras concluir los trabajos.
“En efecto, pero ya en la tarde han abierto el circuito y debe ser cuestión ya de las siguientes horas que se restablezca la presión hasta que (el agua) llegue a las casas”. Aunque reconoció que el corte se extendió a dos días debido a que las roturas afectaron puntos colindantes del mismo circuito. “Ha sido lamentablemente dos roturas en dos sitios colindantes y eso es lo que les ha afectado a los pobladores”, indicó.
El funcionario de la empresa explicó que, pese a que la intervención concluyó durante la tarde del viernes 29 de agosto, aún deben realizarse pruebas hidráulicas para verificar la estabilidad del sistema. Es decir, el servicio podría interrumpirse si es que ocurren nuevas filtraciones con la presión del agua. “Si es que hay fallas, obviamente tendrán que hacer otros ajustes. Naturalmente tendríamos que otra vez parar la carga del sistema, descargarlo y reparar lo que haya”, añadió.
Es menester recordar que, Sedapar no tuvo un plan de contingencia para afrontar esta situación. Y es que mientras se ejecutaban los trabajos de refacción de tuberías, no se dispuso la distribución de agua a través de cisternas. Es decir, los usuarios tuvieron que ingeniárselas para no quedar desabastecidos.

Alza en la tarifa
En medio de este problema de desabastecimiento, Sedapar anunció un aumento tarifario que se realizará conforme al Decreto Legislativo n.° 1620, emitido el 21 de diciembre de 2023, y que regula los reajustes de las empresas prestadoras de servicios de saneamiento bajo supervisión de Sunass (Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento).
La normativa busca equiparar los ingresos y costos de operación de las EPS, pero los usuarios cuestionan que la empresa utilice esta justificación mientras incumple con la prestación del servicio. El alza bordea en promedio de 13,7 % en las tarifas, que comenzará a aplicarse a partir de noviembre.
El ajuste tarifario tiene como objetivo principal cubrir los costos reales de operación del servicio, asegurar la sostenibilidad financiera de la entidad y mantener los subsidios cruzados que benefician a familias en situación de pobreza y extrema pobreza. Según Sedapar, la actualización permitirá también ejecutar proyectos de inversión y mejorar la eficiencia operativa.
No todos los usuarios enfrentarán el mismo aumento. En Arequipa Metropolitana, los ajustes mensuales oscilarán entre S/ 2,40 y S/ 16,80, mientras que en provincias como Camaná, Mollendo, Caravelí y Cotahuasi los incrementos serán menores, desde S/ 0,60 hasta S/ 15,40, dependiendo del consumo y del perfil socioeconómico de cada hogar.

Las familias en situación de pobreza o extrema pobreza continuarán pagando tarifas diferenciadas, con topes máximos según su consumo: hasta 10 m³ con un aumento de S/ 0,80, hasta 17 m³ de S/ 3,80 y hasta 27 m³ de S/ 15,20. En contraste, los usuarios que no reciben subsidios tendrán incrementos más altos: hasta 10 m³ S/ 2,40, hasta 17 m³ S/ 5,40 y hasta 27 m³ S/ 16,80.
El reajuste se justifica porque el estudio tarifario vigente (2021-2026) fue elaborado con una metodología anterior, y las nuevas disposiciones calcularon la tasa de actualización, generando la necesidad de ajustar los precios para reflejar los costos reales del servicio.
Por su parte, la Sunass subraya que no existe posibilidad de omitir este rebalanceo: la norma obliga a garantizar un proceso equitativo, claro y transparente para todos los usuarios, priorizando la cobertura de costos y la protección de los hogares más vulnerables.