EE. UU. impone sanciones a red que financia a Corea del Norte

El gobierno de Estados Unidos, bajo la administración de Donald Trump, anunció nuevas sanciones contra una red acusada de financiar los programas armamentísticos de Corea del Norte. Según la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), entre los señalados figuran el ciudadano ruso Vitali Sergeyevich Andreyev y el norcoreano Kim Ung Sun. Estos habrían canalizado cientos de miles de dólares mediante conversiones de criptomonedas y transferencias internacionales, vinculando empresas fachada en China y Corea del Norte con el Ministerio de Defensa norcoreano.

El Departamento del Tesoro detalló que Andreyev facilitó pagos a Chinyong, una empresa asociada al Ministerio de Defensa norcoreano. Esta recluta profesionales de tecnologías de la información en Rusia y Laos. Desde diciembre de 2024, colaboró con Kim Ung Sun, funcionario consular de Corea del Norte en Rusia, para mover alrededor de 600 mil dólares, según la investigación oficial.

La red también incluye a Shenyang Geumpungri Network Technology, una fachada china de Chinyong, que desde 2021 habría obtenido más de un millón de dólares en ganancias. Asimismo, se señala a Korea Sinjun Trading Corporation, vinculada directamente al Buró Político General del Ministerio de Defensa norcoreano. Para Washington, estas estructuras encubren operaciones destinadas a fortalecer el financiamiento de Pyongyang pese a las restricciones internacionales.

Las sanciones llegan en paralelo al discurso de Trump, quien volvió a resaltar su cercanía personal con Kim Jong Un. El mandatario aseguró que mantiene una “muy buena relación” con el líder norcoreano y reiteró su interés en reunirse con él antes de fin de año. “Es bueno llevarse bien con Kim Jong Un y con todo el mundo”, insistió frente a la prensa en la Casa Blanca.

En ese mismo escenario, Trump también alentó la posibilidad de un encuentro entre Kim Jong Un y el presidente surcoreano Lee Jae Myung. Aunque aclaró que se trata de un asunto entre ambas naciones, sostuvo que “les gustaría” que él participe en ese proceso. “Espero reunirme con Kim Jong Un en un futuro, cuando sea apropiado. Me gustaría verle este año”, enfatizó el presidente estadounidense, marcando un tono de apertura mientras endurece sanciones contra la maquinaria financiera de Pyongyang.