El cruce de la avenida Arequipa con la calle Huáscar, en el sector de Semi Rural Pachacútec del distrito de Cerro Colorado, amaneció este 21 de agosto cubierto por aguas de desagüe teñidas de un inusual color rojo. La escena generó alarma entre los vecinos, quienes denunciaron la constante presencia de colapsos en los buzones de la zona.
Pobladores explicaron que esta no es la primera vez que ocurre un incidente similar. Según señalaron, la empresa Sedapar suele desatorar las redes de alcantarillado, pero a los pocos días los problemas reaparecen. “Para una zona industrial deberían cambiar las redes para que no nos afecte a nosotros que tenemos niños”, manifestó una vecina del sector.
El color rojizo del agua avivó la preocupación, ya que se sospechaba que provenía de algún camal cercano. Horas más tarde, personal de la municipalidad distrital de Cerro Colorado confirmó que, de manera preliminar, la contaminación se originó en un camal clandestino que estaría operando en la zona.
De acuerdo con el reporte de la comuna a Revelación.pe, técnicos del área de Servicios al Ciudadano y de la subgerencia de Monitoreo y Gestión Ambiental llegaron hasta el lugar para realizar las primeras verificaciones. Allí encontraron vísceras de animales, principalmente de aves, mezcladas con las aguas residuales. Lo que reforzó la hipótesis de que se trata de desechos de faena ilegal.
Las autoridades detallaron que, cuando el personal se retiró momentáneamente para traer más equipos, el agua comenzó a drenarse, dificultando la recolección de mayores pruebas. Sin embargo, el municipio aseguró que ya se iniciaron las investigaciones correspondientes para identificar el punto exacto por donde se vertieron los residuos y dar con la ubicación del camal clandestino.
Mientras tanto, pobladores insistieron en que la situación se ha vuelto insostenible. No solo por los malos olores, sino también por el riesgo sanitario que representa para familias con niños y adultos mayores. Exigen acciones inmediatas que vayan más allá de la limpieza momentánea de buzones y que incluyan sanciones para quienes infringen las normas ambientales.
La municipalidad distrital anunció que coordinará con las entidades competentes para clausurar el establecimiento ilegal y evitar que episodios como este se repitan. El hallazgo pone en evidencia la necesidad de un control más riguroso de las actividades comerciales en zonas urbanas y semiurbanas de Arequipa.