Inmobiliarias hacen negocio millonario con terrenos agrícolas

El futuro del Plan de Desarrollo Metropolitano (PDM) 2026-2045 podría quedar marcado por irregularidades que hoy ya comprometen a la gestión urbana de Arequipa. Inmobiliarias ofertan lotes en zonas agrícolas, incluso en áreas reservadas para parques, con precios que superan los 30 millones de soles por proyecto. Documentos del IMPLA y declaraciones de autoridades sugieren adelantos de opinión y filtraciones que alimentan sospechas de complicidad. La presión inmobiliaria amenaza con entrampes judiciales y con repetir los errores del actual plan.

Promueven la depredación

La comercialización de terrenos agrícolas como si fueran urbanos es una práctica recurrente en Arequipa. Inmobiliarias como la Corporación Condes promocionan los proyectos Residencial Viena y Residencial Montecarlo en José Luis Bustamante y Rivero, pese a que oficialmente los predios se mantienen como áreas de reserva para un Parque Metropolitano. Lo grave es que, según lo constatado, en Montecarlo ya se habría vendido el 80% de los lotes.

Los proyecto que promociona Corporacion Condes están en terrenos agrícolas.

El proyecto Montecarlo abarca 23,703 m² y está clasificado como Zona de Recreación y Residencial de Densidad Media, lo que lo destina a un parque, de acuerdo con el Certificado de Zonificación y Vías N° 404-2023 emitido por el IMPLA. Sin embargo, la inmobiliaria ofrece lotes de 160 m² a 1,100 dólares el metro cuadrado, asegurando que “los mejores terrenos ya están vendidos”. En Viena, con alrededor de 60 lotes, los precios fluctúan entre 800 y 1,000 dólares, mientras un canal de riego aún atraviesa la zona.

Las condiciones de venta también levantan dudas. A los compradores se les pide un adelanto del 50% bajo minuta de escritura, con la promesa de pistas, veredas y servicios básicos. Un trabajador de la empresa incluso admitió que el terreno está reservado para parque, pero lo presentó como una ventaja que permitiría construcciones de hasta tres pisos, argumento que contrasta con las restricciones legales de las zonas agrícolas.

La operación inmobiliaria no solo compromete el orden urbano, sino que representa un negocio de gran escala: cada lote puede costar entre 400 mil y 600 mil soles, lo que se traduce en ingresos superiores a los 30 millones por proyecto. Una cifra que ilustra el tamaño del mercado que se abre paso al margen de la legalidad.

Alertan a autoridades

El alcalde provincial tiene la tarea de verificar que no se den cambios de uso que afecten la campiña.

El alcalde de Arequipa, Víctor Hugo Rivera, reconoció estar al tanto de estas ventas y alertó que muchas personas están siendo engañadas. Subrayó que el PDM vigente no ha sufrido modificaciones y que, en consecuencia, no existe autorización alguna para urbanizar terrenos agrícolas. Sin embargo, los anuncios y ventas persisten con total normalidad.

Parte de la explicación se encuentra en documentos internos del IMPLA. Un oficio firmado en enero de 2023 por el entonces gerente German Cutimbo adelantó opinión al señalar que los terrenos pasarían en el nuevo PDM a ser de densidad alta, habilitando edificaciones de hasta siete pisos. Aunque este cambio nunca fue aprobado por el Consejo Provincial, la difusión de mapas tentativos en la web oficial habría legitimado, en apariencia, la comercialización anticipada de terrenos.

La ahora ex presidenta del directorio del IMPLA, Sonia Matta, negó que se haya aprobado algún expediente de cambio de zonificación y recordó que solo el Concejo Municipal puede avalar estas modificaciones. Por su parte, Manuel Málaga, responsable del nuevo PDM, sostuvo que en zonas de chacra no procede un cambio de uso, aunque reconoció la existencia de ventas inmobiliarias en esas áreas.

El escenario apunta a un riesgo mayor: que el nuevo PDM 2026-2045 nazca debilitado por la presión inmobiliaria, filtraciones de documentos, ventas ilegales y hasta el asentamiento de viviendas. De confirmarse colusión entre funcionarios y promotores, el plan podría quedar atrapado en denuncias y juicios, tal como ocurrió con el vigente. Y mientras tanto, los terrenos agrícolas, valuados en millones de soles, se negocian como si fueran parte de la expansión urbana.

Con información de Correo