Negligencia de JUIM deja sin agua a cientos en Majes

Cientos de habitantes y agricultores de Majes sufrieron la suspensión del agua por más de 24 horas tras la fractura de la tubería matriz corrugada de la zona. La Junta de Usuarios Irrigación Majes (JUIM) es señalada por negligencia y falta de supervisión. Mientras el costo de la reparación asciende a unos 10 mil soles, financiados con aportes de los propios agricultores.

El incidente se produjo durante trabajos de retiro de una tubería de PVC en el sector El Alto. Según los testimonios de vecinos y dirigentes locales, un operario de la retroexcavadora invadió el espacio donde se encontraba la tubería matriz, rompiéndola. Mientras la jefa de Conservación del Recurso Hídrico, Andrea Macedo Pilco, y el jefe de Operación y Mantenimiento, Carlos Choquepuma, no supervisaban la labor. La cercanía de apenas 80 centímetros entre la tubería de PVC y la matriz no se consideró al momento de elegir la maquinaria.

James Revilla, ex presidente de la Comisión de Usuarios El Alto, criticó la elección de la retroexcavadora con pala ancha, señalando que se debió emplear una más pequeña para evitar daños. “Se ignoró la técnica y la seguridad, y la maquinaria terminó causando un desastre que podría haberse evitado”, afirmó. Revilla también cuestionó la capacidad profesional de la JUIM y calificó la gestión del Consejo Directivo, liderado por Fernando Olazabal Telles, como una de las peores de su historia.

Por su parte, el gerente de la JUIM, Napoleón Ocsa, reconoció que el daño fue producto de un “error” del operario. Pero los directivos minimizaron el hecho como un simple “incidente” en su comunicado oficial. Y lo peor es que no mencionaron las pérdidas económicas ni la interrupción del servicio que afectó a la población y agricultores.

El costo estimado de la reparación ascendió a 10 mil soles, monto que proviene de los aportes de los agricultores. Mientras tanto, el Consejo Directivo planea priorizar la compra de maquinaria pesada y una camioneta 4×4, valoradas en medio millón de soles. Lo que genera aún más críticas sobre la gestión y las prioridades de la JUIM frente a la comunidad.