El Instituto Regional de Enfermedades Neoplásicas del Sur (IREN Sur) atraviesa una crisis técnica que compromete su capacidad para diagnosticar y tratar a pacientes con cáncer. Desde hace más de un año, al menos tres de sus principales equipos médicos —el tomógrafo, el mamógrafo y el equipo de rayos X— no reciben mantenimiento preventivo. A esta situación se suma que otros dispositivos más complejos, como el resonador magnético, el acelerador lineal y el equipo de braquiterapia, tampoco han sido patrimonializados, lo que impide su gestión directa por parte de la institución.
La doctora Patricia Nina, médico radióloga del IREN Sur, explicó que la falta de patrimonialización significa que esos equipos siguen siendo propiedad del Gobierno Regional de Arequipa. Por lo tanto, el IREN no puede incluirlos en sus planes de mantenimiento ni destinar presupuesto del Ministerio de Salud para su conservación. “Si el equipo no está patrimonializado, el Ministerio no nos puede asignar recursos para mantenerlo operativo”, indicó.
El problema ya ha generado impactos concretos. Por ejemplo, el resonador magnético no puede usarse debido a un fallo en su sistema de refrigeración (humidificador). La doctora Nina precisó que el aire acondicionado y el sistema de chiller que permiten su funcionamiento fueron incorporados como parte de la infraestructura del edificio —y no como parte del equipo— durante su implementación. Esto redujo su garantía del equipo a solo un año, que ya venció. Como consecuencia, cuando ocurrieron filtraciones en el techo, por las lluvias, ambos sistemas se dañaron y ahora requieren una reparación urgente. No se puede encender el resonador sin que recaliente y genere un riesgo de avería.
“Hoy se suspendieron 12 atenciones. Mañana se suspenderán otras 12. Y eso seguirá ocurriendo mientras no se repare este tema. Son pacientes que vienen con citas programadas para estudios cruciales. Algunos están en medio de un tratamiento”, señaló Nina.

Otros equipos
Además, el tomógrafo —el cual opera desde antes de la pandemia— también está en riesgo. Es considerado el eje del diagnóstico en el IREN Sur y realiza hasta 20 estudios por día. Sin embargo, ya venció su garantía técnica y no ha recibido servicio de mantenimiento desde agosto de 2023. “Ese equipo ya está al límite. En cualquier momento puede fallar, y no tenemos un respaldo”, advirtió la especialista. Lo mismo sucede con el mamógrafo que tiene un sensor en problemas. «Con el debido cuidado estamos llevando a cabo los diagnósticos», sostuvo Nina.
Pese a los informes técnicos y solicitudes enviadas, el Gobierno Regional de Arequipa aún no responde. La doctora también cuestionó las prioridades de la actual gestión regional. “Se prefieren arreglos menores como camillas o sillas, porque cuestan menos. Pero un tomógrafo tiene un impacto mucho mayor. Deja sin atención a toda una población”, subrayó.
El IREN Sur atiende no solo a pacientes de Arequipa, sino también de regiones como Cusco, Puno, Madre de Dios e incluso Ica. La demanda ha aumentado tras la pandemia, en la que se detectan casos de cáncer más avanzados.