Un nuevo conflicto tensa aún más las relaciones laborales en el Gobierno Regional de Arequipa (GRA). Una protesta de obreros de Construcción Civil escaló hasta convertirse en un violento altercado en la obra vial «La Nueva Molina», un tramo crucial de la autopista Arequipa–La Joya. La detonante de esta confrontación fue la decisión de la empresa constructora de despedir a siete trabajadores. Esto incluye a dos figuras prominentes del sindicato, lo que encendió la indignación y la posterior reacción airada de sus compañeros.

La mañana de este lunes 19 de mayo, un contingente de aproximadamente cincuenta miembros del Sindicato de Construcción Civil irrumpió en la obra, desatando una escena de caos y confrontación. Registros videográficos capturaron el momento en que Percy Huaracayo, secretario de Organización del sindicato, increpó a un trabajador que documentaba la escena con su teléfono móvil, cuestionando airadamente su acción de grabar. Segundos después, la grabación se tornó inestable al ser rodeado el trabajador por el grupo de manifestantes.

Las imágenes revelan además actos de agresión física. Tales como una patada por parte de un miembro del gremio a un obrero que transitaba por el lugar. Este hecho puntual exacerbó la tensión, derivando en una trifulca. Paralelamente, los manifestantes insistían a los trabajadores a no registrar la escena a través de videos. El saldo de la protesta incluyó la rotura del parabrisas de una camioneta y daños considerables en el almacén de la obra. 

Frente a estos hechos, el consejero regional Aaron Maldonado, quien preside la Comisión de Infraestructura, expresó su firme rechazo ante las agresiones suscitadas. Maldonado ofreció una explicación sobre los despidos, argumentando que los trabajadores cesados presentaban un rendimiento significativamente inferior al esperado. Según sus declaraciones tras una inspección en la obra, el rendimiento de estos obreros se situaba inicialmente en un 25% de lo proyectado. Una cifra que incluso descendió a un 15% con la implementación de refuerzos. Esto generó retrasos en la ejecución de la obra y un aumento en los costos de este tramo vial de importancia estratégica.

En este contexto, el consejero Maldonado adelantó que su comisión llevará a cabo una exhaustiva evaluación de la normativa vigente que otorga al sindicato de Construcción Civil una participación del 60% en las obras. “Este tipo de comportamiento, lamentablemente recurrente, resulta inaceptable. Revisaremos a fondo la ordenanza que concede esta cuota de participación a Construcción Civil en proyectos de carácter público”, sentenció el representante regional.

Por su parte, Alfredo Puño ofreció una versión distinta de los acontecimientos. Aseguró que su presencia en la obra obedeció a la intención de establecer una mesa de diálogo con la residente de obra en relación al despido de los siete trabajadores. El dirigente afirmó haber logrado la reincorporación de los dos dirigentes sindicales. Si bien reconoció la existencia de altercados, sostuvo que los individuos responsables de los actos violentos no pertenecen a su gremio. 

En tanto, el GRA no ha emitido ningún comunicado al respecto. Este medio también intentó comunicarse con el gerente de Infraestructura, Fabián Enriquez Mamani, pero no respondió las llamadas ni los mensajes de WhatsApp. Es menester recordar que, el gremio ha sido acusado de “extorsionar” al gobernador Sánchez al tener mayoría en las cuotas laborales de los proyectos.