La noticia de la elección del cardenal León XIV como el nuevo Sumo Pontífice también desató una ola de júbilo en Arequipa. El monseñor Javier Del Río Alba (arzobispo) expresó la profunda alegría de la comunidad peruana ante esta designación, resaltando la estrecha y duradera conexión del Santo Padre con la nación peruana.
«Es una noticia que hemos recibido con enorme alegría en el Perú. Precisamente por la profunda conexión que él tiene con nuestro país y por su nacionalidad peruana», afirmó el monseñor. Recordó con afecto los inicios de su labor pastoral en la zona norte del Perú, así como su posterior desempeño como administrador apostólico de la diócesis del Callao durante la difícil etapa de la pandemia.
El arzobispo arequipeño enfatizó la importancia de la continuidad en la labor de la Iglesia que implantó Francisco, al mismo tiempo que reconoció su capacidad de renovación: «Lo que se necesita es continuar. La iglesia siempre ha tenido una continuidad, está llamada a renovarse, pero una continuidad. La iglesia no es una institución política, es humana y divina. Estamos todos unidos por la misma fe, pero naturalmente hay distintas perspectivas teológicas”, añadió.
En sus declaraciones, monseñor Del Río Alba también abordó temas relevantes en el debate actual, recordando la postura del Papa Francisco sobre el matrimonio igualitario entre personas del mismo sexo y el cambio climático. «El Papa Francisco nunca ha aceptado el matrimonio de personas del mismo sexo. Pero si nos llevó adelante atendiendo asuntos que han ido surgiendo en las últimas épocas, como el cambio climático y los colectivos LGBT.»
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Asimismo, resaltó la labor del pontífice saliente en la lucha contra los abusos sexuales, señalando que León XIV tendría que seguir por el mismo sendero. «Lo que ha hecho el papa Francisco lo hizo porque los anteriores dieron pasos, en la iglesia hay una continuidad. En ese sentido, recibimos con tanta alegría a León XIV porque va a seguir esa línea”, concluyó.
Las palabras del monseñor Javier Del Río Alba reflejan el sentir de la comunidad peruana. Anticipando una continuidad en la labor de la Iglesia iniciada por Francisco. Al tiempo que vislumbran una renovación pastoral atenta a los desafíos contemporáneos como el cambio climático y la inclusión. Aunque manteniendo las posturas doctrinales fundamentales sobre temas como el matrimonio. La expectativa se centra ahora en cómo León XIV guiará a la Iglesia universal, manteniendo la senda de lucha contra los abusos.
