La noche del 24 de enero de 2025, en el distrito de Cocachacra, provincia de Islay, Arequipa, 189 pobladores decidieron iniciar un paro indefinido contra el proyecto minero Tía María. La protesta está programada para el 17 de febrero, tras una votación que priorizó esta fecha sobre otras propuestas.

En la reunión fue liderada por el dirigente Miguel Meza Igme y respaldada por la Federación Departamental de Trabajadores de Arequipa. Además, participaron también los alcaldes distritales de Deán Valdivia y Punta de Bombón. Los asistentes discutieron la necesidad de frenar el impacto ambiental y social atribuido al proyecto minero de la empresa Southern.

Los dirigentes señalaron que sus esfuerzos por dialogar con las autoridades nacionales no han tenido resultados. Ante la falta de atención, acordaron la medida de fuerza como un llamado de urgencia para proteger el valle de Tambo. Esta es una zona históricamente agrícola afectada por actividades mineras.

Durante la reunión, algunos comerciantes y trabajadores de las playas de Islay solicitaron postergar el paro hasta después de la temporada de verano. Sin embargo, la mayoría optó por el 17 de febrero, resaltando la necesidad de actuar cuanto antes frente a la crisis ambiental.

Denuncian abandono

El alcalde de Punta de Bombón, José Ramos Carrera, denunció en una conferencia previa que el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego no brindó el apoyo necesario para enfrentar la contaminación causada por aguas con metales pesados en la provincia de Islay. Según Ramos, esta situación ha afectado tanto a los pobladores como al ganado.

Además, cuestionó la declaratoria de emergencia en los pueblos afectados, calificándola de insuficiente. Expresó que la dotación de cisternas de agua no cubre las necesidades básicas de la población, agravando el malestar social en la región.

Aunque la fecha del paro está definida, la organización interna aún presenta retos. La conformación de comisiones quedó pendiente debido a la disconformidad de algunos asistentes con los acuerdos tomados. Una nueva reunión será convocada para ultimar detalles y asegurar la efectividad de la protesta.