La obra musical del compositor y guitarrista peruano Adolfo Zelada Arteaga fue declarada Patrimonio Cultural de la Nación por el Ministerio de Cultura. Un reconocimiento que resalta su contribución al repertorio popular de la música criolla y su valor como referente de identidad cultural. Este homenaje consolida su lugar en la historia artística del Perú.

Nacido en Trujillo y formado musicalmente en el barrio Monserrate de Lima, Zelada inició su carrera acompañando a reconocidos intérpretes criollos en escenarios como el teatro Segura y el teatro Municipal. A los 17 años, comenzó a trabajar en Radio Victoria, colaborando con figuras emblemáticas como Jesús Vásquez, Lucha Reyes y Los Morochucos. Esto marcó el inicio de su prolífica trayectoria.

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Además de su faceta como guitarrista, Zelada compuso temas que se convirtieron en piezas esenciales del repertorio criollo. Podemos resaltar el vals «Sentimiento falaz» y la marinera «Cholita Norteña». Su obra incluye más de 200 composiciones registradas, que abarcan diversos géneros tradicionales, como la zamacueca y la polka.

Zelada fue parte de importantes agrupaciones culturales como Perú Negro y el Conjunto Nacional de Folklore. Además de colaborar con Victoria Santa Cruz en el grupo Teatro y Danzas Negras del Perú. Estas experiencias enriquecieron su estilo y lo posicionaron como un puente entre la música criolla y las tradiciones afroperuanas.

Su legado trasciende los escenarios. Como docente, enseñó técnica instrumental y canto popular en la Pontificia Universidad Católica del Perú, dejando una huella en las nuevas generaciones. También obtuvo reconocimientos con premios como las Palmas Artísticas en el grado de Gran Maestro y como la “Mejor Guitarra Criolla del Perú”.

Este reconocimiento como Patrimonio Cultural de la Nación subraya la relevancia de Adolfo Zelada Arteaga como uno de los mayores exponentes de la música criolla y afroperuana. Y consolidan su influencia en la cultura musical del Perú y del mundo.

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