La pugna sindical sigue escalando en Arequipa. Esto luego de que el Sindicato de Construcción Civil bloqueara reuniones entre el Gobierno Regional y otros gremios del sector construcción. Estas acciones buscan evitar que otros nuevos sindicatos formados en Arequipa interfieran en las gestiones locales y sean reconocidos como interlocutores válidos.
El gremio de Construcción Civil considera una amenaza para los intereses de sus afiliados que el GRA se reúna con otros sindicatos. Denuncian que estas organizaciones intentan establecer acuerdos «irregulares» con el gobierno. De esa forma ponen en riesgo la estabilidad laboral de los agremiados de Arequipa.
La consejera regional Norma Ortega expresó su preocupación por el creciente poder e influencia que está tomando el sindicato de Construcción Civil. Y señaló que esto podría frenar el desarrollo de obras importantes. Ortega enfatizó que es vital garantizar que los proyectos avancen sin interrupciones, priorizando el bienestar de la comunidad sobre intereses particulares.
Representantes del sindicato local argumentan que su postura busca proteger los derechos de los trabajadores de Arequipa. Aseguran que están siendo desplazados por mano de obra foránea.
Pugna con agresiones
La disputa entre ambos sindicatos trajo consecuencias. Una agremiada de la Federación de Trabajadores (Fetra) fue agredida por los obreros de Construcción Civil cuando intentaba ingresar a la sede central del GRA. La secretaria general, Mercedes Nuñez Gutiérrez, denunció que incluso la amenazaron al intentar bloquear el diálogo con la gestión de Rohel Sánchez.
“Mi compañera Vilma Gallegos fue agredida en las instalaciones del Gobierno Regional por más de 30 varones de Construcción Civil. Eso linda con lo delincuencial. Ella estaba entrando, la detuvieron y la arrastraron. Por poco más y la matan sin haber hecho nada. Si no viene la Policía hubiera sucedido un hecho deleznable”, contó a Revelación Nuñez.
También advirtió que el sindicato de Construcción Civil busca tomar el control de todas la obras. Y no quiere dejar opción a qué otros gremios coloquen trabajadores en las obras de gran envergadura. Por esa trifulca, la reunión no prosperó. El gobernador y sus funcionarios cerraron la comunicación.