Las obras de los colegios Villa Don Jorge y César Vallejo, en la provincia de Camaná, están paralizadas debido a una protesta de brazos caídos de los obreros de Construcción Civil. Los trabajadores adoptaron esta medida en solidaridad con sus compañeros despedidos y acusados de consumir licor en horario laboral en playas de Camaná.
El Gobierno Regional informó que los despedidos incluyen a residentes, un almacenero y un guardián de ambas obras. Sin embargo, los trabajadores aseguran que algunos de ellos participaron en las actividades fuera del horario laboral, por lo que exigen una investigación imparcial y la pronta reincorporación de los afectados.
El paro, que ya lleva cuatro días, preocupa a la comunidad educativa. Las obras registran apenas un 45% de avance y debieron entregarse este mes. Cada día de inactividad representa un retraso considerable. Padres de familia y directores han expresado su malestar por esta situación.
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Procedimientos disciplinarios
El gobernador regional enfatizó que mantendrá la decisión tomada y señaló que se aplicarán los procedimientos administrativos disciplinarios. Los involucrados deberán presentar sus descargos y, si se confirman las acusaciones, serían reubicados o desvinculados definitivamente.
Aunque el Gobierno Regional designó a nuevos residentes en ambas obras, los trabajadores se niegan a retomar sus labores. Como alternativa, proponen reincorporar a los despedidos y permitirles recuperar las horas perdidas progresivamente. No obstante, la solución final dependerá del área de obras del Gobierno Regional.
Esta protesta no solo genera retrasos en la entrega de infraestructuras vitales, sino también pérdidas económicas. Los obreros, al no trabajar, dejan de percibir sus pagos, mientras que la paralización afecta directamente a cientos de estudiantes que esperan acceder a mejores instalaciones educativas.
Las autoridades regionales consideran inaceptable que estas medidas afecten el desarrollo de obras cruciales, especialmente cuando la situación puede resolverse por otros medios. Por ello, llamaron a la conciliación y pidieron retomar las labores mientras concluyen las investigaciones que decidirán si sancionan o absuelven a los implicados