Por Gustavo Puma Cáceres. Planificador Urbano Territorial y Portuaria, Gobernanza Territorial y Gestión de Ciudades Puerto
Este lunes conmemoramos la Batalla de Ayacucho, librada el 9 de diciembre de 1824. Un enfrentamiento decisivo que aseguró la independencia del país y también del resto de América del Sur. Un hecho que marcó el comienzo de una nueva era para el Perú y América del Sur. Pero marcada por 200 años de desfragmentación económica, social y cultural en toda la nación.
Se me vino a la memoria el libro de Alfonso Quiroz “Historia de la corrupción en el Perú”. Un libro que todo peruano y peruana debe leer. Claro que les dará coraje y dolor de saber cómo y quienes manejaron el país de mala manera. El autor describe y analiza con detalle el abuso de los recursos públicos y explica cómo la corrupción ha limitado el desarrollo y el progreso del país. Un desarrollo que aún no existe. Según estimaciones las pérdidas económicas causadas por la corrupción en el país ascienden a más de 22 mil millones de soles.
Les presento algunos de los principales problemas que sigue enfrentando el Perú en estos anacrónicos 200 años:
1. Desarrollo desigual: La falta de planificación ha llevado a un desarrollo desigual entre las 25 regiones del país. La desigualdad territorial nace en Lima y cada vez es más centralista. Con algunas áreas experimentando un crecimiento económico significativo.
2. Pobreza y desigualdad: A pesar de los avances económicos, siguen siendo problemas significativos en el Perú. La falta de acceso y el derecho a los servicios básicos como la educación, la salud y el agua potable ha contribuido a perpetuar estos males sociales.
3. Deterioro ambiental: La falta de planificación y regulación ha llevado a un deterioro ambiental significativo en el Perú, con la minería informal y el bendito Registro Integral de Formalización Minera (REINFO), con la deforestación, la contaminación del agua y la degradación del suelo, siendo algunos de los problemas más graves que este Gobierno y Congreso no han solucionado.
4. Falta de infraestructura: Ha limitado el crecimiento económico y el desarrollo del país. La falta de carreteras, ferrocarriles, puertos y aeropuertos modernos ha aumentado los costos de transporte y reducido la competitividad de las empresas peruanas. Estoy seguro que el Mega Puerto de Chancay va a reconfigurar la dinámica económica.
5. Informalidad: La falta de planificación y regulación ha llevado a un desarrollo de la informalidad en la economía peruana, con muchos trabajadores y empresas operando fuera del sistema formal. Esto ha limitado el acceso a servicios básicos y ha reducido la recaudación de impuestos.
6. Pérdida de identidad cultural: La globalización y la urbanización han contribuido a la erosión de las tradiciones y las culturas afrodescendientes e indígenas sobre todo en la sierra y selva.
7. Desafíos en la educación y la salud: Su ineficiencia ha limitado el desarrollo humano y la productividad en el país. Han perpetuado la pobreza y la desigualdad, y se ha acrecentado después de la pandemia.
En resumen, es importante que el país aprenda de sus errores y trabaje hacia un futuro más próspero y equitativo para todos. Pero primero nuestra tarea es que aprendamos a saber elegir a nuestros gobernantes y no tener lo que hoy tenemos. ¡Seamos ciudadanos inteligentes! no más waykis, ni gobernadores Rolex como en Ayacucho.