Un año después del feminicidio de Ana Paola Vargas Ramos, sus familiares siguen pidiendo justicia y una sanción ejemplar para el feminicida.
A más de un año del feminicidio de Ana Paola Vargas Ramos, quien fue asesinada por su expareja en el interior de la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA), su familia sigue esperando justicia. En declaraciones, advirtieron que se quiere tratar el caso como homicidio y no como feminicidio. La sanción debe ser drástica y que sancionen al asesino como corresponde enfatizó Rocio Ramos Huallpa, prima de la víctima.
El junio de este año, el juzgado colegiado Penal especializado en Delitos Asociados a la Violencia contra la Mujer e Integrantes del Grupo Familiar inició el juicio oral por el feminicidio de la joven universitaria. Actualmente, el caso sigue sin una sentencia. La prisión preventiva del acusado venció recientemente, pero buscan ampliarlo por pedido del Ministerio Público indicó la prima de Ana Paola.
Los familiares de la víctima se reunieron frente al módulo de Justicia en Paucarpata para exigir justicia. Además, asistirán a una audiencia presencial sobre el caso. Anteriormente, las demás audiencias se dieron de manera virtual. Aún no se sabe cuanto tiempo más tomará el proceso judicial mencionaron los familiares.
La prima de Ana Pola señaló que buscan que el caso se tipifique como feminicidio. Sin embargo, la defensa del acusado, Rodrigo Franco Larico Olarte, quiere lo contrario y que se considere homicidio. Por medio de ese cambio se estaría buscando reducir la pena según Rocio Ramos.
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La familia expresó su dolor por la prolongación del proceso y el impacto emocional. “Revivir el momento a cada instante es un sufrimiento doble para todos” indicaron. La prima de la víctima pide al sistema judicial que la sanción sea drástica y que cumplan su labor como se debe. “Apelamos al corazón de los jueces, que no dejen espacio para la impunidad”, añadieron.
Sus familiares recuerdan a Ana Paola como una joven estudiante dedicada a su carrera de Ingeniería Industrial en la UNSA. “Siempre destacó en todo su proceso educativo, desde primaria hasta la universidad”, recordó su prima. La familia se reuné una vez más para buscar justicia.
