Un ciudadano venezolano fue detenido por un grupo de vecinos tras romper las lunas de una combi en la parte alta del distrito de Cayma. La rápida intervención de la comunidad permitió controlar al agresor hasta la llegada de la policía.
Un ciudadano venezolano fue detenido este martes en el sector de Senasa, cerca del pueblo joven Embajada de Japón en el distrito de Cayma, luego de lanzar piedras contra una combi de servicio público, rompiendo las lunas de la unidad con placa de rodaje B0X-335. La agresión ocurrió mientras la combi esperaba el traslado de pasajeros en un paradero cercano.
Vecinos de la zona, alarmados por el ataque, acudieron rápidamente al lugar y lograron reducir al agresor. Armados con toallas y correas, los ciudadanos actuaron para detener al individuo, atándolo hasta la llegada de las policías. Según algunos testigos, el hombre mostraba un comportamiento errático y violento mientras rompía las lunas de la combi.
El conductor de la unidad, se mostró consternado por el ataque. “No entiendo por qué lo hizo, solo estaba esperando que subieran pasajeros”, comentó el chofer afectado. Los daños materiales en la unidad afectaron principalmente dos lunas laterales del lado derecho, lo que impedirá que la combi siga operando hasta su reparación.
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Los agentes de la comisaria de Acequia Alta llegaron hasta el lugar minutos después del ataque para detenerlo y trasladarlo a la comisaría de la zona. El ciudadano venezolano, cuya identidad aún no se reveló, se encuentra bajo custodia. Se espera que se le realicen las investigaciones correspondientes para determinar las causas del ataque.
Los vecinos de la zona del pueblo joven Embajada de Japón expresaron su preocupación ante el incremento de actos violentos en su sector. “Es la primera vez que vemos algo así, pero últimamente hemos notado más inseguridad”, comentó una de las vecinas. Piden una mayor presencia policial y medidas que aseguren la tranquilidad de la comunidad.
Este incidente ha reavivado el debate sobre la seguridad ciudadana y la respuesta rápida de la comunidad frente a situaciones de riesgo. La participación activa de los vecinos fue clave para controlar la situación, aunque las autoridades recomiendan no actuar por cuenta propia en este tipo de casos para evitar mayores peligros.