Padres de familia piden que las instalaciones de la institución educativa vuelvan al estado para asegurar la continuidad en la enseñanza de los escolares, aunque hasta el momento no han recibido una respuesta favorable.
Más de 500 estudiantes del colegio Nuestra Señora de los Dolores enfrentan un posible desalojo tras recibir una notificación del Arzobispado de Arequipa en marzo. Esta situación ha generado preocupación en la comunidad educativa, que exige una solución inmediata para evitar la pérdida de sus instalaciones ubicadas frente a la plaza Las Américas, en Cerro Colorado.
Padres de familia, docentes y estudiantes exigen que el terreno de aproximadamente 1,300 metros cuadrados se devuelva al Estado. Figuras políticas locales como la consejera Marleny Arminta, el congresista Edwin Martínez y el alcalde de Cerro Colorado, Manuel Vera, han respaldado esta demanda y mostrado su apoyo públicamente.
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Arzobispado en silencio
El director del colegio, Mario Apaza Ticona, explicó que el terreno pertenecía al Estado hasta 1984, cuando se entregó a la Parroquia Nuestra Señora de los Dolores. Apaza mencionó que han buscado ayuda en varias entidades para asegurar la continuidad educativa, pero no han recibido una respuesta positiva hasta ahora.
La falta de comunicación del Arzobispado ha creado incertidumbre y tensión en la comunidad educativa, que teme un posible desalojo. Los padres sienten que la situación vulnera el derecho a la educación y afecta la estabilidad emocional de sus hijos.
Mientras tanto, la comunidad educativa del colegio Nuestra Señora de los Dolores espera una resolución que garantice el derecho a la educación de los estudiantes afectados. Las autoridades locales continúan presionando para que el terreno sea devuelto al Estado y se evite un desalojo que perjudicaría gravemente a la comunidad.
