La demora en el destrabe del hospital Maritza Campos, en Cerro Colorado, mantiene en abandono a miles de familias que no acceden a los servicios de salud. Los pobladores de 50 asociaciones del margen derecho del Cono Norte exigen la instalación de un centro provisional mientras. Esto porque el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) no libera recursos y el proyecto, en el mejor de los casos, podría entrar en operatividad en un año. 

Ante esta prolongada espera, dirigentes vecinales plantearon un plan de contingencia que permita instalar un centro de salud temporal. El objetivo es atender a las familias que quedaron sin servicios médicos luego de la demolición de la antigua posta para iniciar los trabajos del hospital.

Eleazar Chino Sotomayor, presidente del Frente de Defensa de la Margen Derecha de Cerro Colorado, recordó que enviaron un memorial en marzo solicitando la inspección de la Gerencia de Salud para reinstalar un puesto de salud. “Han pasado más de siete años y no se tiene una posta. El centro de Nazareno no se abastece para toda la población”, señaló.

La situación se agrava porque el proyecto del hospital fue diseñado para ejecutarse en un plazo de año y medio. Sin embargo, hasta ahora no hay fecha definida para el inicio real de operaciones ni garantías presupuestarias que aseguren la continuidad del proceso.

Mientras tanto, más de 50 asociaciones de vivienda en la zona no acceden fácilmente a servicios médicos. La lejanía y la saturación de centros cercanos dificultan la atención, generando malestar entre los pobladores que ven postergada una necesidad básica.

Los vecinos aseguran que incluso ofrecieron un local social para habilitar un puesto de salud provisional. No obstante, los cambios de titular en la Gerencia de Salud y la falta de coordinación institucional paralizaron estas gestiones, sin que se concrete la inspección solicitada.

Frente a este escenario, los dirigentes anunciarán nuevas acciones para exigir atención inmediata. La exigencia principal es que se instale un centro temporal de salud en el Cono Norte, mientras se resuelve el destrabe del Hospital Maritza Campos, considerado vital para la seguridad sanitaria de toda la margen derecha de la ciudad.