A sus 21 años, Guadalupe Ramírez Benavente irrumpió en la escena musical con una fuerza arrolladora, conquistando corazones y cosechando éxitos a pasos agigantados. Su talento innato, su voz poderosa y sus letras que navegan por las profundidades de las emociones la están convirtiendo en una referente para las nuevas generaciones. No es casualidad que, a su corta edad, se proyecte como una de las voces más prometedoras de la música en Arequipa. 

Lupita, como la conocen en el mundo artístico, logró conectar con el público a través de la sensibilidad que impregna cada una de sus canciones. Sus letras, que exploran el amor, el desamor y las complejidades de la vida, resuenan en el alma de quienes la escuchan. Su estilo musical, que fusiona elementos de la cumbia, salsa y otros géneros peruanos, es un reflejo de su personalidad. 

Lupita canta desde los 7 años y fue su abuelo quién la apoyó a pulir su talento.

El camino de Lupita

Desde los 7 años, la música ha sido su compañera inseparable. Y aunque todo comenzó como un pasatiempo, su derroche de talento la llevó a cristalizar su vocación y conquistar escenarios locales. Ahora, su estilo bohemio al vestir, con un toque vintage y desenfadado, complementa a la perfección su imagen de artista auténtica y genuina.

Los primeros aplausos para la joven artista llegaron durante su época escolar, donde su talento vocal no pasaba desapercibido. Lupita era la niña talentosa que ponía de pie a la comunidad estudiantil en todas las actividades escolares. Era alguien a quien esperaban con ansias para cerrar con broche de oro. Y también cantaba en coros musicales de algunas parroquias. 

Con el paso de los años, marcó distancia de la música, pues sus padres tenían otros planes para ella, que no iban de la mano con su pasión. Pero Guadalupe, con la tenacidad que la caracteriza, nunca se rindió. Con el apoyo de su abuelo, tomó clases de canto y comenzó a pulir su técnica, incursionando en bandas locales que le permitieron ganar mayor experiencia en los escenarios. 

“Llevo cantando desde los siete años. Cantaba en las actividades de mi colegio y por eso me metí a talleres de canto. Desde muy chiquita me gustaba la música. De parte de mis papás no tenía mucho apoyo, ellos querían que estudie una carrera profesional. Mi abuelito era el que creía en mí y me llevaba a mis clases de canto. Y ya cuando se me dio la oportunidad de cantar, empecé sin pensarlo”, cuenta Lupita. 

Su salto a los escenarios 

Hoy Lupita canta en la orquesta musical Huambbé, teniendo presentaciones en Arequipa y el sur.

El año 2024 marcó un punto de inflexión en su carrera musical. Lupita dio el salto a las orquestas digitales, un formato que le permitió ampliar su repertorio y llegar a un público más diverso. Sus presentaciones en restaurantes, discotecas, aniversarios y eventos especiales se convirtieron en una vitrina para su talento, atrayendo la atención de la orquesta Huambbe, a la que se unió recientemente.

“Empecé a trabajar en orquestas profesionalmente el año pasado. Al comienzo me daba mucho temor por el momento pánico escénico, no me animaba por ese aspecto. Hasta que me dieron la oportunidad y comencé a cantar en grupos digitales. Cantamos en matrimonios, discotecas y otros eventos sociales”, añade la artista. 

Su ambición y versatilidad la impulsan a soñar en grande: formar parte de un grupo reconocido a nivel nacional e internacional. Sabe que el camino es largo y exigente, pero su determinación y su pasión son sus mejores aliados. Para contactarla para cualquier tipo de eventos, su número de contrato es el 941491138. 

Otra de sus pasiones 

Además del canto, Lupita está terminando la carrera de odontología, para complementar su vida.

Además de su carrera musical, Guadalupe continúa sus estudios de odontología en la Universidad Católica de Santa María (UCSM). Actualmente realiza sus prácticas en una clínica privada. Para ella, la odontología y la música no son caminos separados, sino dos facetas de una misma pasión que la impulsan a seguir adelante. 

“Aspiro a ser lo que me gusta, quiero ser odontóloga y cantante. Yo hago lo que me gusta. Me gustaría perfeccionar lo que me falta y llegar a grupos conocidos. Tuve que batallar con mi mente para dar un paso adelante y ahora ya estoy forjando mi camino en ambos rubros”, concluye mientras se prepara para saltar al escenario para conquistar a su público. 

Guadalupe Ramírez Benavente o también conocida como Lupita, es una joven talentosa y multifacética que ha sabido combinar sus dos pasiones con éxito. Su historia es un ejemplo de perseverancia, pasión y dedicación. Con su talento y su carisma, no cabe duda de que llegará muy lejos, tanto en el mundo de la música como en el de la odontología.