La presidenta de México refuta a Alejandro Nolasco, quien la llamó "analfabeta" por exigir disculpas a España por la conquista.
En medio de una crisis diplomática entre México y España, la presidenta Claudia Sheinbaum respondió con firmeza a Alejandro Nolasco, portavoz de Vox en Aragón, quien la calificó de “absoluta analfabeta e ignorante”. Este intercambio ocurrió tras la exclusión del rey Felipe VI de la ceremonia de toma de posesión de Sheinbaum.
La mandataria mexicana destacó las atrocidades cometidas durante la conquista, afirmando que “hubo matanzas” en lugar de un simple “encuentro de dos mundos”. Su declaración rechazó de manera contundente la narrativa histórica que minimiza los impactos negativos de la colonización en los pueblos originarios de América.
Sheinbaum citó las críticas de Nolasco, quien se opuso a su postura sobre la conquista y afirmó que México no debería exigir disculpas a España. La presidenta subrayó que reconocer estas atrocidades es crucial para honrar la memoria de las culturas indígenas que sufrieron durante ese periodo.
El portavoz de Vox, por su parte, defendió las acciones de España durante la conquista y aseguró que no pedirán perdón por su historia, además de descalificar a las culturas indígenas como “horripilantes”. Estas declaraciones han generado un debate sobre la percepción de la historia colonial y sus repercusiones en la actualidad.
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Buscan reconciliación
La presidenta, al igual que su antecesor Andrés Manuel López Obrador, ha insistido en la necesidad de una disculpa oficial por parte de España. Esta demanda forma parte de una política más amplia que busca reivindicar los derechos y la memoria de los pueblos indígenas en México.
Claudia Sheinbaum reiteró que la solicitud de disculpas no solo persigue el reconocimiento de los errores del pasado, sino también enaltecer a las naciones indígenas. “Es importante que el Estado español pida perdón por las atrocidades”, afirmó durante su rueda de prensa.
La falta de invitación al rey Felipe VI para su toma de posesión se ha convertido en un símbolo de la tensión diplomática entre ambos países. A medida que se intensifica el cruce de declaraciones, la discusión sobre la historia colonial y sus implicaciones sigue siendo un tema central en el ámbito político y social.